Berlín, capital del veganismo

Temas como la sostenibilidad, los precios de la carne y, sobre todo, el amor por los animales, son los que hacen que cada vez más personas den la espalda al consumo regular de carne en sus dietas. Al principio, parece una gran limitación. Pero conforme una persona se va sumergiendo en este mundo, se da cuenta de la gran cantidad de alternativas que hay, de la variedad de los platos que existe y del entusiasmo que le ponen aquellos que se declaran vegetarianos incondicionales. Y dentro de estos, los veganos, aquellos que no consumen no solo carne o pescado, sino tampoco ningún otro producto procedente de un animal, como huevos, o lácteos, son un colectivo que cada día gana interés y adeptos.

Berlín es un punto de especial interés para veganos en Alemania. En la capital existen ahora mismo más de 20 restaurantes veganos, y la tendencia sigue en aumento. No solo eso: cada vez más restaurantes corrientes ofrecen alternativas veganas para sus clientes, y también algunos supermercados veganos han empezado a abrir sus puertas en Berlín. Un ejemplo es el local “Veganz”, donde los cajeros llevan camisetas con el mensaje “Amamos la vida”, y en sus estanterías se pueden encontrar productos provenientes de todo el mundo.

Su grupo objetivo es gente joven y dinámica dispuesta a probar cosas nuevas, como la noruega Hanne Julie Treidene. Para la joven estudiande de música, las oportunidades veganas que ofrece Berlín son uno de los puntos clave que le animaron a tomar la decisión de trasladarse a la capital alemana para estudiar: “Berlín es, sin duda, el mejor lugar de Europa para un vegano ahora mismo”.

La rebelión vegana

Y es que la oferta es grande; tanto, que ya ha salido al mercado una nueva aplicación para buscar los locales veganos más cercanos: el App Berlin Vegan Guide. Con esta aplicación, por ejemplo, cualquier transeúnte que esté paseando cerca del barrio de Kreuzberg puede descubrir fácilmente cafeterías veganas como Die Rebellion des Zimsterns (“La rebelión de la estrella de canela”).

Fundada por la actual dueña, Claudia Tunger, y su hermana en 2006, la cafetería comenzó con una oferta de dulces y aperitivos vegetarianos, pero la demanda de platos veganos fue en aumento, y desde hace cinco años se pueden comer también alternativas veganas en sus mesas de madera: ensaladas, bocadillos, quiches, pastas, tartas... Un atractivo elemento para turistas de todo el mundo, según Claudia Tunger: “Sobre todo vienen españoles, italianos, franceses, ingleses y también alemanes”.

Alta cocina vegana

Desde el punto de vista gastronómico, el mayor reto es, sin duda, montar un restaurante exclusivamente vegano, sobre todo si se aspira a preparar cocina de vanguardia. MioMatto, un restaurante italiano y vegano que abrió sus puertas el pasado año en la Warschauer Strasse de Berlín, es uno de los pocos que han dado este paso. “Para mí, lo más importante es la calidad”, explica su chef, Björn Moschinski. “Pero conseguir una cocina de alta calidad completamente vegana no es fácil. No hay muchas posibilidades para aprender a ser un chef vegano directamente. Un buen chef debe aprender a cocinar de todo, incluyendo la carne, y después se puede especializar, el proceso debe ir en este orden, y no se da a menudo.”

Con una cocina sorprendente y muy elaborada, Björn Moschinski demuestra que el veganismo puede ser una alternativa no solo sana, sino también muy creativa y apasionante en la cocina. Sus platos son todo un espectáculo para los sentidos, aunque, claro está, prepararlos tampoco es fácil. Como muestra, hoy tenemos una receta del último libro de cocina del chef Moschinski, "Hier und jetzt Vegan" ("Vegano aquí y ahora"): Filetes de apio empanados con arroz de acelga y semillas de calabaza caramelizadas.

Autora: Christina Deicke / Lydia Aranda Barandiain
Editor: Pablo Kummetz