El acuerdo negociado en Moscú entre los presidentes Vladímir Putin y Víktor Yanukóvich no ha gustado a los manifestantes en Kiev. Rusia garantiza un crédito para Ucrania de 11.000 millones de euros y un sustancial descuento en las importaciones de gas. Líderes opositores como Vitali Klitschko y la encarcelada Yulia Timoshenko consideran que el convenio pone en peligro la independencia del país.