Diputados alemanes condenan impunidad en México
28 de noviembre de 2014La diputada alemana Heike Hänsel, del partido La Izquierda, fue la primera parlamentaria de un país extranjero en llegar a Ayotzinapa la semana pasada justo cuando el gobierno alemán emitió una advertencia a sus ciudadanos sobre la inseguridad en el estado de Guerrero, instándolos a evitar dicho destino. Hänsel anima a sus connacionales a viajar a ese estado y mostrar su solidaridad a los familiares y compañeros de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa.
La diputada se enteró de la desconfianza de las familias en el gobierno y sus instituciones; en la clase política mexicana. “Los familiares se quejaron de malos tratos de la fiscalía estatal, de que no son informados de nada. No se sienten tomados en serio, al contrario, sus protestas son criminalizadas. Muchos grupos de DDHH temen que esta campaña de criminalización es utilizada para distraer la atención de los crímenes”. Hänsel también se reunió con representantes de la Procuraduría General de la República (PGR), que le hablaron sobre las innumerables reformas jurídicas e instrumentos en el papel, que no se implementan en la práctica.
Clara señal hacia México
“Creo que es necesaria una señal muy clara de la Unión Europea, de Alemania y de todos los países, que no se permita al gobierno mexicano volver a la normalidad porque Ayotzinapa es tan sólo la punta del iceberg”. Hänsel advierte que ocurren toda clase de delitos pero no hay culpables, pese a que hay tantos testigos. “Impera casi un 100% de impunidad, ese es el problema de fondo de México, es la base que hace posible que sucedan estos crímenes, porque los verdugos saben que nunca serán castigados”.
La diputada alemana reportó este viernes sus impresiones junto con representantes de organizaciones no gubernamentales alemanas que la acompañaron en el recorrido ante un grupo de diputados miembros de la Comisión Parlamentaria para el Desarrollo.
Uno de los diputados que tomó parte en dicha reunión fue el diputado cristianodemócrata (CDU) Helmut Heiderich, miembro del Grupo Parlamentario Alemán-Mexicano, que recibió la víspera a la embajadora de México en Alemania, Patricia Espinosa y al subsecretario de Relaciones Exteriores, Juan Manuel Gómez Robledo, responsable de DDHH de dicha dependencia. “Vemos a México como un país que experimenta un desarrollo industrial pero por otro que tiene la imagen devastadora de la criminalidad, los asesinatos y el horror que todo eso implica. Tenemos una imagen dual que nos preocupa”, dice Heiderich.
Cumplir con compromisos internacionales
El diputado del partido de la canciller Angela Merkel señala que el gobierno mexicano tiene que cumplir con los convenios internacionales que ha firmado en materia de Derechos Humanos; tiene que proteger a la población que habita en estas regiones apartadas y peligrosas. “Según lo que sabemos esto no ha sucedido”.
Heiderich insiste en que la prioridad del gobierno es reforzar las instituciones de seguridad a nivel estatal y municipal, someterlas a un escrutinio para constatar si son capaces de garantizar la seguridad ciudadana o si son parte del problema. “No queremos simplemente esperar a que esto suceda sino que presionamos para que se investiguen los crímenes de manera que se sepa quienes son los responsables y que éstos sean castigados con penas de cárcel y no que tras un breve tiempo vuelvan a estar libres. Eso se lo dijimos a la embajadora y al subsecretario y nos dijeron que eso se está haciendo”.
Para el diputado socialdemócrata (SPD) Frank Schwabe, la imagen de México no ha cambiado. “Es un país muy difícil de gobernar de manera que hay regiones en donde el Estado no tiene ninguna autoridad”. El parlamentario subraya la necesidad de un diálogo político entre México y Alemania sobre el Estado de Derecho. “Hay que debatir sobre las causas que hacen posible que un país como México, al igual que otros, se encuentren al borde de la ingobernabilidad, por lo menos amplias regiones. Esto claramente tiene que ver con el hecho de que la criminalidad organizada ha asumido el poder. Hay que hablar sobre las causas, sobre los márgenes de ganancia que deja el negocio del narcotráfico", señala aludiendo a la política prohibicionista en el consumo de drogas que ha prevalecido hasta ahora.