Estrategias contra el terrorismo, el odio y la violencia
27 de noviembre de 2023"Causas y dinámicas de la violencia: ¿cómo romper la ola?” El tema y el título de la reunión de la Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA) en Wiesbaden ya se había decidido mucho antes del 7 de octubre de 2023, día en el que terroristas de Hamás asesinaron en Israel a más de 1.000 personas y secuestraron a más de 200, según fuentes israelíes.
El pogromo antisemita y la intervención militar israelí en la Franja de Gaza, con más de 10.000 muertos, según cifras palestinas, pesó como una sombra sobre el evento en Hesse, sede de la central de ese organismo de seguridad alemán.
Mucha más delincuencia por motivos políticos
"Desde el 7 de octubre hemos observado un fuerte aumento en la proporción de delitos por motivos políticos con ideología extranjera o religiosa", afirmó el presidente de la BKA, Holger Münch. Hasta el 22 de noviembre, es decir, en seis semanas, se habían registrado 3.744 delitos.
Sólo en octubre, el número de casos fue tres veces mayor que todos los delitos registrados en el período de enero a septiembre de 2023. "Esperamos un aumento adicional", destacó Holger Münch, aludiendo a que hay que contar con casos reportados con retraso.
¿Cómo provoca Hamás emociones con imágenes?
La estrategia mediática de Hamás muestra que las imágenes emocionales pretenden atraer a un gran número de potenciales seguidores.
Incluso si Hamás no es tan grande en Alemania, no se debe subestimar el impacto de tales imágenes, advirtió el presidente de la BKA: "Nuestra evaluación de riesgo es que los perpetradores, en particular los que actúan en solitario, sin duda lo percibirán como un impulso".
El psicólogo israelí-alemán Ahmad Mansour compartió los temores de Holger Münch. Indicó que las masacres filmadas por Hamás y difundidas en Internet estaban dirigidas a judíos de todo el mundo, especialmente en Israel.
El grupo terrorista islamista está librando una guerra en varios frentes. El objetivo es desestabilizar a los países árabes moderados, pero también a Europa, agregó.
Islamistas en Gaza, activistas en Alemania
Mansour, de raíces árabe-palestinas, culpa a los islamistas en Gaza y a los activistas en Alemania. Dice que actuaron de manera muy profesional, en alemán, inglés y francés, "con el objetivo de desastibilizar las calles y sacar a la gente a las calles en masa".
Esta estrategia es obviamente exitosa si se recuerdan las imágenes de gente vitoreando en barrios predominantemente musulmanes de algunas ciudades, como Neukölln, en Berlín. Allí, como en otros lugares, celebraron el terrorismo asesino de Hamás en Israel.
Se trata del derecho de existencia de Israel
Desde entonces, Ahmad Mansour se pregunta, más que nunca, cómo se puede ganar a esta parte de la sociedad en favor de la democracia. No se trata de prohibir las manifestaciones propalestinas. "Se trata de no cuestionar el derecho de existencia de Israel y de no gritar consignas antisemitas", afirmó.
Por sus muchos años de experiencia en proyectos contra la radicalización y debido a su procedencia, el investigador, que vive en Alemania desde 2004, conoce los entornos musulmanes en todos sus matices. En su trabajo observó lo que es necesario: el desmantelamiento de las estructuras patriarcales, la libertad de expresión y de religión y, sobre todo, la lucha contra el antisemitismo.
Ahmad Mansour, legitimidad de las críticas a Israel
"Salir a las calles por la causa palestina es legítimo. Estar en contra de la política de asentamientos de Israel es legítimo", afirmó Ahmad Mansour. Pero no es legítimo celebrar el terrorismo. Gritar "Desde el río hasta el mar, Palestina será libre" no es legítimo, porque significa la destrucción del Estado judío.
Para salir de este círculo vicioso, Ahmad Mansour pidió una ofensiva democrática: labor masiva de prevención y enseñanza de valores en las escuelas, en los cursos de integración y en los lugares donde vive la gente: "Para esto necesitamos encuentros, para esto necesitamos debates, para esto necesitamos acceso emocional a las personas”.
Límites que no se deben traspasar
Sin embargo, Ahmad Mansour también señaló los límites que no se deben traspasar: "Las represalias son necesarias cuando la gente desprecia sistemáticamente nuestra sociedad y ve la violencia política como un medio legítimo contra los oponentes políticos". El experto en integración cree que es urgente acelerar los procedimientos penales.
La presidenta de la Policía de Berlín, Barbara Slowik, también está haciendo presión en este sentido. Sin embargo, en la reunión de otoño de la Oficina Federal de Investigación Criminal, advirtió contra la estigmatización de ciertos grupos de la población: "El apoyo a la violencia por parte de un sector, desde mi punto de vista pequeño, de musulmanes en Berlín, conduce a experimentar prejuicios generalizados".
La vía berlinesa: prevención y represión
Según Barbara Slowik, la receta contra la violencia en Berlín es una mezcla de represión y prevención: "Esto incluye una intervención muy temprana y consecuente para prevenir trayectorias criminales". La labor de sus agentes casi deriva en trabajo social, afirmó.
Para reducir prejuicios y miedos al contacto entre los jóvenes y la Policía, sobre todo en zonas socialmente desfavorecidas, se han puesto en marcha proyectos en el campo del esparcimiento, informó Slowik. "Nuestros colegas juegan al fútbol, cocinan o diseñan parques infantiles, así comparten experiencias y emociones", dijo.
La presidenta de la Policía de Berlín lamentó que también sea cierto que, a pesar de muchas colaboraciones con otras organizaciones, no se puede lograr una prevención integral.
Disturbios en Nochevieja
La capital alemana experimentó cuán candente son los problemas de integración mucho antes de la escalada actual en el Cercano Oriente. Los disturbios entre jóvenes y la Policía en la víspera de Año Nuevo de 2022, causaron espanto.
El gobierno federado de Berlín respondió con una cumbre contra la violencia juvenil con 20 millones de euros.
La esfera política, la Justicia, las escuelas, los representantes de deportes y funcionarios de integración se sentaron todos a debatir. "Pero necesitamos más para frenar la ola de violencia”, subrayó Barbara Slowik. Además de prevención y represión, se requiere la colaboración de la sociedad para tener democracia y paz social.
(rmr/ers)