Alemania lanza nueva iniciativa de paz
8 de febrero de 2004Alemania sigue creyendo en la paz. En el marco de la cuadragésima "Conferencia de Seguridad" que tiene lugar en Múnich, el ministro federal de Relaciones Exteriores, Joschka Fischer, ha lanzado una nueva iniciativa de paz para el Cercano y Medio Oriente. Fischer instó a la Unión Europea y a sus colegas miembros de la Organización del Atlántico Norte (OTAN), presentes en Múnich, a hacerse partícipes de un programa de coordinación para el futuro de esta región en conflicto. "Otro fracaso de los intentos de pacificación puede poner la alianza en peligro", advirtió el político ambientalista alemán.
En medio de las turbulencias generadas por los "juegos estratégicos" de Bush y Blair para justificar la guerra contra Irak, Alemania da un paso adelante y pone de presente que la lucha se tiene que dar contra el terrorismo y no contra los pueblos. En el Medio y Cercano Oriente urge la estabilización. Sabiendo que la estabilidad estatal, económica y social sólo se logra en una sociedad en paz, el trabajo por hacer en esta, como en otras regiones y países del mundo, es titánico.
¿Comunidad económica mediterránea?
La idea de Joschka Fischer apunta a una cooperación a largo plazo, en los campos político, jurídico, cultural y de seguridad. Dentro de las propuestas alemanas se cuentan una "comunidad económica con todos los países mediterráneos" de Europa, Asia y África. Fischer piensa en "una zona de libre comercio a realizarse hasta el 2010". Las reacciones a la nueva iniciativa de paz del Gobierno socialdemócrata y verde alemán, no se han hecho esperar. La jefe del partido cristianodemócrata alemán, Angela Merkel, alabó las intenciones de Fischer pero no desaprovechó la oportunidad para criticar su negativa a enviar soldados alemanes con un contingente de la OTAN a Irak. "Alemania no debe ignorar las peticiones de sus socios", replicó la política.
Fischer: "Profundo escepticismo"
En contra de los temores de la oposición alemana, todo parece indicar que Berlín no se opone al papel de la OTAN en el actual proceso de estabilización de Irak. Lo que no quiere decir que quiera hacerse partícipe directo de ellos. Al respecto, Fischer ha demostrado serias dudas y recalcó que Alemania no desplegaría sus tropas a territorio iraquí. "El riesgo de fracaso y la posibilidad de serias y fatales consecuencias para la alianza deben de tenerse en cuenta. La honestidad me exige que no disimule mi profundo escepticismo", dijo Fischer añadiendo que las Naciones Unidas deberían tener un papel central en la estabilización del país en la posguerra.
Francia también sigue reacia
Estados Unidos y otros aliados son partidarios de que la OTAN – a la cual pertenecen 19 países - tome el mando de la fuerza de unos 9.000 soldados, actualmente bajo mando polaco, en la zona centro y sur de Irak después de que se devuelva la soberanía al pueblo iraquí el 1° de julio. Francia y Alemania, principales opositores europeos a la invasión militar encabezada por Estados Unidos que derrocó a Saddam Hussein, son reacios a enviar a las fuerzas de la alianza a Irak. París dejó claro que buscaría una resolución, o al menos un apoyo formal, del Consejo de Seguridad de la ONU, para legitimar la operación de la OTAN.
Alemania: convencida de las vías pacíficas
En la conferencia anual sobre Seguridad, también estaba presente el secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld. Fischer y Rumsfeld chocaron, hace un año, en el mismo foro, sobre las justificaciones de Washington para emprender una guerra contra Irak. Con la voz quebrada por la emoción, Fischer se volvió en aquella ocasión a Rumsfeld y dijo: "No estoy convencido. Ese es mi problema. No puedo dirigirme al público y decir estas son las razones, porque no creo en ellas". Esta vez, con respecto al fracaso de Estados Unidos a la hora de hallar las supuestas armas de destrucción masiva en Irak, Fischer aseguró que "los acontecimientos le han demostrado a Alemania que su posición pacifista era – y sigue siendo - la correcta".