Alemania no pasa en Nicosia de un empate 1 a 1 ante Chipre
16 de noviembre de 2006El partido se mostró complicado desde el primer momento para Alemania que se encontró con un equipo chipriota muy bien organizado en defensa y con jugadores con velocidad para tratar de explotar ocasiones de contragolpe.
Alemania controló el partido durante buena parte del primer tiempo pero tenía problemas para llegar a la portería contraria lo que hizo que en el partido hubiera pocas ocasiones de gol. El juego alemán era ante todo de paciencia, esperando a que se dieran errores que se pudieran aprovechar y sólo se pudo ir en ventaja gracias a un lanzamiento de falta que Michael Ballack mandó al fondo de la red con un derechazo desde unos 25 metros después de un compañero le tocara el balón para abrir la barrera.
Las carreras de Odonkor
De resto, Alemania sólo tuvo otra ocasión en el minuto 25, la única vez que David Odonkor logró aprovechar su velocidad para llegar a la raya de fondo ya lanzar el centro para dejar a Bastian Schweinsteiger en buena posición de marcar.
Lo demás eran centros que morían en las cabezas de los chipriotas, intentos por llegar tocando que naufragaban o pérdidas de pelota antes de llegar al área contraria. A partir del minuto 40 los esfuerzos ofensivos chipriotas se hicieron más intensos. Primero hubo una campanada de alerta en una situación comprometida que terminó salvando el defensa Clemens Fritz y luego, en el minuto 43, llegó el empate con un remate de primera de Janis Okkas tras recibir un centro desde la banda izquierda.
Gigante atolondrado por un enano
A comienzos del segundo tiempo los chipriotas estuvieron a punto de marcar el segundo, tras un error tremendo del arquero Timo Hildebrand que ya en la jugada del empate no había ofrecido una figura muy afortunada. Esta situación, lejos de ser algo aislado, resultó ser un anuncio de lo que se le venía a los alemanes en el segundo tiempo.
Envalentonados por las continuas pérdidas de balón del equipo de Joachim Löw en el centro del campo, los chipriotas se fueron haciendo cada vez más agresivos y en varios contragolpes produjeron situaciones de zozobra. Alemania, tras el empate, había perdido el control y Chipre era mejor y por la manera como jugaba era claro que no se conformaba con el empate.
Alemania no perdió, pero decepcionó
Al final el destino no fue tan cruel con Alemania pero el empate es suficientemente decepcionante y además deja al equipo de Joachim Löw en una situación difícil frente al próximo partido contra la República Checa en el que serán baja Miroslav Klose y Clemens Fritz que vieron su segunda tarjeta amarilla.