Alemania: un lugar medio en la TIC

Alemania como plaza de la tecnología de la información y la comunicación (TIC) ocupa el puesto siete en el clasificación mundial. Entre los 15 mejores del mundo, Corea del Sur, Estados Unidos y Japón lideran los negocios en el ramo. También vecinos europeos, como Dinamarca, Suecia y Gran Bretaña se hallan por delante de Alemania en el ranking de los 15 países líderes en la tecnología de la información. Esto debería y tiene que cambiar, dijo la canciller alemana, Angela Merkel.

El sector TIC invierte un siete por ciento en la investigación y el desarrollo. "Es uno de los sectores más innovadores", subrayó Merkel. Dado que el 40 por ciento de la innovaciones alemanas se dan en esa área, “no nos podemos conformar con ocupar sólo el séptimo lugar entre las 15 plazas líderes en el mundo, podemos y tenemos que mejorar”, agregó Merkel.

La clave de la felicidad económica

Lo cierto es que la TIC es un ramo clave que influye considerablemente en otros sectores de la economía. En Alemania hay 850.000 personas empleadas en el sector, su volumen de facturación alcanza los 140 mil millones de euros. Desde el año 2006, políticos, científicos y representantes de la industria se encuentran anualmente en una cumbre nacional TIC. Allí no sólo se revisa lo que han logrado los diversos grupos de trabajo durante el año en curso, sino que se establecen metas para el siguiente período.

¿Cuán seguro es el ramo?

Seguridad fue el tema candente en el encuentro 2010 en Dresde, pues las revelaciones del portal WikiLeaks, la protección de los datos es una herida abierta. Y precisamente en ese tema, para el futuro del sector es importante que los usuarios tengan confianza en el espacio virtual.

Así, cloud computing, la computación en nube que permite ofrecer servicios de computación a través de Internet, es una de las mayores fuentes de crecimiento del ramo. Para el almacenamiento de datos en redes –las nubes- y no en computadores locales el crecimiento previsto es de un 48 por ciento. Esto presupone que el usuario tenga la seguridad de que sus datos van a ser almacenados de manera eficiente y que van a estar protegidos de utilizaciones irregulares.

El ministro alemán de Economía, el liberal Rainer Brüderle, se preocupa por la seguridad en la infraestructura de la información. Para su ministerio quiere un grupo de trabajo especial que se dedique a la seguridad informática. “La guerra cibernética hasta hace poco totalmente irreal, sólo se la encontraba en las novelas de ciencia ficción; hoy es un peligro palpable”, dijo Brüderle en Dresde.

Por eso es importante desarrollar el sector, el formar especialistas; es necesario “que desarrollemos métodos para asegurarnos de que no nos pueden anular desde fuera. Es un campo altamente sensible y una tarea permanente”, resaltó el ministro.

Se busca expertos en TIC

Expertos en la materia no le sobran a Alemania; en este momento, en este ramo hacen falta 30.000 profesionales y la tendencia es al alza. El Gobierno alemán está considerando la posibilidad de traer especialistas del extranjero. En este contexto, Brüderle abogó por una inmigración ordenada y de calidad. En la coalición gubernamental actual a este respecto no hay consenso.

“Tenemos que atraer a los especialistas del extranjero”, opina August Scheer, presidente de la Asociación Bitkom, quien no entiende que la política se niegue a verlo. Scheer utiliza a propósito la palabra “atraer”; es que a juzgar por ciertos discursos políticos se podría pensar que la fuerza especializada dispuesta a trabajar en Alemania está ya en la frontera, haciendo fila para entrar. “No es muy seguro que todos los especialista de la India quieran venir justo a Alemania”, resaltó el ministro. Más bien es Estados Unidos, debido a la lengua, su objetivo.

Más esfuerzo de la política

Con todo, no sólo es la falta de personal especializado lo que mueve a la industria a pedir el apoyo de la política. Son también las condiciones para la investigación: según los representantes del ramo no son las óptimas. “La investigación es la transformación de dinero en saber; innovación es la transformación de saber en dinero”, afirma Peter Bauer, presidente de Infineon-Technologies. Y las empresas que trabajan a nivel internacional se plantean cuestiones muy sencillas: ¿cuánto cuesta investigar en otros países y cuánto cuesta en Alemania?, también se preguntan ¿cuán buenos son los especialistas que están en el mercado y qué quieren los clientes?

“En comparación con otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Alemania compite en desventaja con vecinos como Francia, Austria y Holanda. Esto significa que Alemania, a pesar de su buen rendimiento, es demasiado cara para la investigación”, afirma Bauer.

Una posible salida a ello podría pasar por una reducción impositiva para los proyectos de investigación; sin embargo, el Gobierno federal no ha querido dar el paso y sigue prefiriendo incentivar la investigación a través de proyectos estatales, en los cuales Berlín tiene derecho a voto.

Autora: Sabine Kinkartz/Mirra Banchón
Editor: Pablo Kummetz