Alemania urge a israelíes y palestinos a reanudar conversaciones de paz
26 de septiembre de 2011
En su discurso ante el Asamblea General de las Naciones Unidas este lunes (26.09.) en Nueva York, el ministro alemán llamó, como era de esperar, a israelíes y palestinos a reanudar “sin pérdida de tiempo” negociaciones de paz.
Ello puede ser interpretado como una negativa a votar en el Consejo de Seguridad –del que Alemania es actualmente miembro no permanente durante dos años– a favor del reconocimiento de un Estado propio solicitado la semana pasada por Mahmud Abbas, el presidente palestino. No obstante, el ministro no dijo explícitamente cómo votará Alemania.
La seguridad de Israel, “razón de Estado”
Westerwelle pronunció su discurso poco antes de que el Consejo de Seguridad comience con las deliberaciones en relación con la solicitud palestina, que es pasada como un hierro caliente de mano en mano. Por el momento no existe una fecha para la votación definitiva. Las deliberaciones en el seno del Consejo de Seguridad pueden llevar meses, lo que quizás pueda dar espacio efectivamente a algún tipo de negociaciones de último momento.
Como sea, la iniciativa y sobre todo el pausado y sensato discurso de Mahmud Abbas ante la Asamblea General le han ganado muchas simpatías a los anhelos palestinos. Como un hacha sobre el proceso pende, no obstante, el problema de los numerosos asentamientos israelíes en Cisjordania, en teoría en tierras que serían parte de un probable futuro Estado Palestino.
En todo caso, en el Consejo de Seguridad las opiniones con respecto a la cuestión están divididas. Westerwelle resaltó en su discurso que Alemania está –como la mayoría de los otros países miembros de la ONU— a favor de la creación de un Estado Palestino. “Y no queremos postergar la creación de ese Estado a un futuro indefinido y lejano”, dijo el ministro, “pero tampoco queremos dejar duda de que para Alemania, la seguridad de Israel es una razón de Estado”.
Por otro lado, es posible que esta Asamblea General apruebe por mayoría el reconocimiento de un “Estado Palestino observador”, aunque no miembro, lo que equipararía su estatus al del Vaticano, por ejemplo.
EE. UU.: un veto anunciado
El Gobierno alemán aboga por una “solución de dos Estados”, uno israelí y otro palestino. “Dos Estados, en paz uno junto al otro, ello es posible”, dijo Westerwelle, “pero la senda hacia esa solución pasa por negociaciones”.
Los Estados Unidos ya han anunciado que interpondrán su veto en el Consejo de Seguridad contra la aceptación de un Estado Palestino en la ONU sin tratado de paz con Israel.
En un plan del Cuarteto del Oriente Próximo –formado por la ONU, la UE, EE. UU. y Rusia—se recomienda que israelíes y palestinos comiencen con nuevas conversaciones en un plazo de un mes y que culminen dentro de un año con un tratado de paz. Muchos expertos dudan que ello sea realista, en vista de la empantanada situación.
Norte de África: tiempo y paciencia
Dirigiéndose a los países en transformación democrática en el norte de África, Westerwelle prometió más ayuda alemana, resaltando sobre todo el apoyo económico. Advirtió, sin embargo, que la senda hacia la democracia y mejores condiciones de vida será “todo menos fácil”. El proceso “exige tiempo y paciencia”, sentenció.
En cuanto a Siria, el ministro alemán de RR. EE. exigió una nueva resolución de la ONU contra el régimen de Bashar al Assad, que “oprime a la oposición con brutal violencia”.
No fue sino hacia el final de su discurso que volvió sobre el recurrente tema alemán de una reforma de la ONU. También la ONU “debe adaptarse a un mundo en transformación”, advirtió, pero, lamentó, “hasta ahora no se ha logrado ningún progreso decisivo”.
En el marco de una reforma de la ONU, Alemania se esfuerza desde hace años sin éxito por obtener un lugar permanente en el Consejo de Seguridad, al igual que Japón, Brasil y la India.
Autor: Pablo Kummetz
Editora: Emilia Rojas Sasse