Amnistía Internacional denuncia explotación laboral en Qatar
1 de diciembre de 2015La organización sin ánimo de lucro Amnistía Internacional (AI) denunció hoy (01.12.2015) que en Qatar continúa “la explotación laboral incontrolada”, cinco años después de que el país se adjudicara la Copa del Mundo de la FIFA en 2022.
“A menos que se tomen acciones -y pronto- todo aficionado que visite Qatar 2022 debería preguntarse a sí mismo cómo puede estar seguro de no estar beneficiándose de la sangre, el sudor y las lágrimas de trabajadores inmigrantes”, señaló en un comunicado Amnistía Internacional.
Las autoridades qataríes no han llevado a cabo reformas significativas para poner fin de manera efectiva a la explotación laboral crónica y la FIFA no ha presionado al respecto, señala el comunicado publicado por la ONG. “Apenas se ha hecho nada para abordar los abusos incontrolados contra los trabajadores migrantes. La tardanza en llevar a cabo reformas laborales en Qatar conduce irremediablemente al desastre en materia de derechos humanos”, dijo Mustafa Qadri, un investigador de Amnistía Internacional encargado de analizar los derechos de los migrantes.
Qadri agregó que las propuestas de reforma del Gobierno qatarí no abordan los problemas esenciales que dejan a tantos trabajadores a merced de su empleadores, e incluso estos cambios están tardando en aplicarse. Amnistía Internacional aseguró que la FIFA también tiene responsabilidad en esta situación ya que “sabía que había problemas de derechos laborales en Qatar”, por lo que la ONG pidió que se esfuerce en “garantizar que la Copa del Mundo no está basada en la explotación”.
Informes negativos
La organización ha realizado cinco visitas de investigación a Qatar en los últimos cuatro años para examinar las condiciones de la población trabajadora migrante, que se espera que ascienda a dos millones de personas en los próximos dos años.
En un informe de mayo de 2015 se determinaron nueve cuestiones fundamentales sobre los derechos de los trabajadores migrantes, que no han sido abordadas por Doha. Entre estas recomendaciones figura el pago puntual de los salarios, el compromiso de aumentar el número de inspectores de trabajo hasta 400 antes del final de 2015 -aplazado un año- y la reforma del restrictivo sistema de patrocinio conocido como “kafala”.
Además, con el nuevo sistema seguirá siendo necesario el consentimiento del empleador para que los trabajadores cambien de trabajo o salgan del país. “Los trabajadores migrantes continúan encontrando impedimentos para acceder a la justicia y miles de ellos consiguen a duras penas recibir atención médica y otros servicios básicos, tardan en obtener el permiso de residencia o viven y trabajan en condiciones intolerables”, dijo el investigador de AI.
Por ello, AI instó a la FIFA a que presione a las autoridades cataríes para que lleven a cabo reformas a fin de proteger los derechos de los trabajadores migrantes y hagan un seguimiento de su implementación. En este sentido, pidió a la FIFA y a sus socios empresariales que establezcan sistemas de diligencia para identificar y prevenir los abusos contra los derechos humanos relacionados con la celebración del Mundial.
JC (EFE, dpa)