Apagón en Venezuela, temor en Cuba
11 de marzo de 2019Como un trauma nacional, aquellos largos cortes eléctricos, el transporte público colapsado y los estantes vacíos de los mercados se han quedado grabados en la memoria de varias generaciones. Por estos días, las imágenes de oscuridad y caos que salen de Venezuela avivan nuevamente ese fantasma en la Isla.
En el país con las mayores reservas de petróleo del mundo, la gente anda a tientas, cocina la comida apurada para evitar que se le eche a perder por falta de refrigeración y 21 pacientes han muerto en los hospitales por falta de fluido eléctrico, según la ONG Médico por la Salud. La inseguridad en las calles se agrava con la falta de servicio eléctrico y la falta de cobertura móvil mantiene incomunicadas a cientos de miles de familias. La situación no puede ser más simbólica, como si una larga noche se hubiera terminado por cernir sobre el país.
El Palacio de Miraflores culpa de la falla a un descomunal ataque de sus enemigos internos con "el apoyo y la asistencia de Estados Unidos" y dice tener pruebas que presentará ante Naciones unidas. Pero lo cierto es que desde hace una década, los apagones se han vuelto un escenario común en Venezuela y se han ido acumulando las voces de alarma que advierten sobre el deterioro de la red eléctrica. Los primeros testimonios y reportes que van saliendo indican que lo que comenzó el pasado jueves tiene más de desastre anunciado que de golpe desestabilizador.
Como un gigante herido en el talón, el país sudamericano está viviendo momentos que pocos hubieran podido imaginar hace dos décadas, cuando millones de venezolanos auparon a Hugo Chávez para que llegara a la presidencia de la República y comenzara un proceso renovador que derivó en el actual régimen de Nicolás Maduro, criticado por los organismos internacionales, repudiado por buena parte de la población y considerado por otros como "un traidor" del chavismo.
En estos días difíciles, en lugar de implementar un efectivo mecanismo de emergencia y de brindar información transparente de en qué punto se encuentran los arreglos del sistema eléctrico, Maduro ha preferido asumir el guión de la víctima, aprovechar la ocasión para lanzar consignas políticas y refugiarse en el secretismo. Por su parte, la Asamblea Nacional, con Juan Guaidó al frente, determinó cortar todo el suministro de petróleo a Cuba y convocar a manifestaciones contra quien llaman "el usurpador".
En la Plaza de la Revolución de La Habana la tensión crece, debido a que la crisis económica interna se profundiza y aumenta ahora la amenaza de perder las partidas petroleras que, a pesar de haber menguado en los últimos años, siguen llegando a la Isla desde Venezuela. Pero a lo que más teme el oficialismo cubano es a la reacción de la gente, a cómo van a comportarse los ciudadanos si el Período Especial regresa, no como una fantasma sino como una realidad.
(jov)