La historia tras el video del niño con fuegos artificiales

En el tráfago de información que circulaba en redes sociales el pasado sábado 24 de noviembre con motivo de la suspensión de la esperada final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y River Plate, hubo un video que comenzó a reproducirse y compartirse una y otra vez. En él se ve a una mujer escondiendo bengalas en el cuerpo de un niño para poder ingresarlas al Estadio Monumental. El pequeño quedaba lleno de fuegos de artificio, como si portara un cinturón de explosivos.

La grabación, captada desde un vehículo, causó impacto por el aparente desinterés de la mujer, que vestía la camiseta de River, por el bienestar del muchacho. Por ello, el Ministerio Público de la Ciudad de Buenos Aires tomó el caso, y con ejemplar eficiencia la identificó gracias a su reloj, que se repetía en unas fotos que había subido a su cuenta de Instagram, la detuvo y allanó su vivienda en busca de pirotecnia. Así se supo que el menor que aparece en el video tiene 6 años y las autoridades pudieron evaluar a la familia, para ver si mantenía la tuición del niño y de sus tres hermanos.

La mujer se expone ahora hasta a seis años de prisión por "poner en riesgo la vida del menor a quien tiene el deber de proteger”. Pudo haber sido peor. El Artículo 106 del Código Penal argentino dice, según Clarín, que "la pena será de reclusión o prisión de 3 a 10 años, si a consecuencia del abandono resultare grave daño en el cuerpo o en la salud de la víctima. Si ocurriere la muerte, la pena será de 5 a 15 años de reclusión o prisión".

Karina Leguizamón, presidenta del Consejo del Menor y la Familia, dijo que los menores están ahora al cuidado del padre, mientras la madre está detenida. El hombre "estaba abatido”, dijo Leguizamón, según Infobae, y definió a los muchachos como "emocionalmente muy dañados”. Agregó, sin embargo, que "no podemos separar a los chicos de la familia” porque ello implicaría "un daño mayor para ellos”.

El abogado de la mujer, Carlos Broitman, dijo a Clarín que "lo que ella tenía en su poder no podía poner en riesgo ni a sus hijos ni a nadie. Para que hayamos asumido la defensa, tenemos la certeza de que lo que se vio no pudo nunca haber puesto en peligro la vida de otras personas ni de sus hijos”. Como sea, el registro causó mucho impacto y no todos comparten en redes sociales la opinión del abogado Broitman.

(CP)

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