Así es “Mursi”, el designado primer presidente civil de Egipto
24 de junio de 2012El anuncio lo hizo el presidente de la Comisión, Faruk Sultan, en una rueda de prensa retransmitida en directo en El Cairo. La participación registrada en la segunda vuelta de los comicios fue del 51,85 por ciento, cuatro puntos porcentuales menos que en la primera, dijo la Comisión al presentar los resultados oficiales definitivos tras varias postergaciones. Shafik fue ex ministro y último jefe de gobierno del régimen del ex presidente Hosni Mubarak, expulsado del poder por una revolución popular el 11 de febrero de 2011. Por ello era considerado representante del antiguo régimen.
La noticia, que se esperaba con mucha tensión tras las últimas decisiones del gobernante Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, fue celebrada por una multitud de seguidores de Mursi congregados en la plaza Tahrir de El Cairo.
El presidente de la comisión, Sultan, denunció sin embargo "presión, calumnias y mentiras por parte de determinados sectores políticos". Sin nombrarlos directamente pareció referirse a la Hermandad Musulmana, que declaró vencedor a Mursi poco después del cierre de los locales electorales y sin esperar el dictamen de la comisión.
Poco antes amenazaron con revueltas si había fraude electoral y Mursi no era declarado ganador. Por otro lado, los seguidores de Shafik expresaron una visión apocalíptica ante la posibilidad de un "estado religioso" en el caso de que el candidato islámico llegara al poder.
Faraones, reyes y militares
Por primera vez en la historia, los Hermanos Musulmanes, fundados hace 80 años, alcanzan la presidencia de Egipto. También es la primera vez que el país cuenta con un civil como presidente, después de que faraones, reyes, mandatarios extranjeros y generales ocuparan la jefatura de Estado.
Sin embargo, Mursi no contará con poderes tan amplios como sus predecesores, tras las medidas adoptadas por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que recortaron ampliamente sus competencias mediante decretos constitucionales. Así, Mursi no podrá ordenar la intervención del Ejército sin la aprobación de los militares y tampoco podrá decidir sobre su personal y su financiación.
Instituciones civiles “a ciegas”
Con el nombramiento está también más cerca la transmisión del poder a un gobierno civil, después de más de 16 meses en manos de los militares tras la marcha de Mubarak. La cúpula militar anunció su intención de entregar el poder a Mursi y al gobierno que designe el 30 de junio.
Sin embargo, las instituciones civiles actúan a ciegas, tras la disolución del Parlamento - electo a principios de año y dominado por las fuerzas isámicas- que ordenó el Tribunal Constitucional dos días antes de la segunda vuelta de las presidenciales. Así, los militares asumieron las tareas legislativas y presupuestarias.
En tanto, el grupo palestino islamista radical Hamas se mostró hoy encantado con la victoria electoral del candidato de los Hermanos Musulmanes. Mahmud al Sahar, uno de los líders de la organización, dijo hoy que la victoria de Mursi supone el apoyo a la lucha contra la ocupación israelí. "Los perdedores en esa lucha son Israel y sus aliados en la región", dijo Al Sahar en referencia a la organización palestina moderada Al Fatah.
Cientos de miembros de Hamas celebraron la victoria de Mursi en las calles, repartieron dulces y dispararon tiros al aire. El líder de Hamas en Gaza, Ismail Haniya, felicitó por teléfono al vencedor por su victoria, informó su oficina.
Fuente: dpa
Editor: José Ospina-Valencia