Ataque talibán mata a 21 soldados en Afganistán
23 de febrero de 2014Los talibanes afganos mataron hoy a 21 soldados gubernamentales en el ataque más sangriento de los últimos meses sufrido en Afganistán. Llevado a cabo contra un puesto de control en una remota región de las montañas junto a la frontera con Paquistán, en el distrito Kunar Ghaziabad, la incursión se salda también con siete soldados desaparecidos, un asaltante muerto y otros dos heridos. La noticia ha hecho posponer al presidente Hamid Karzai el viaje oficial a Sri Lanka que tenía plafinicado hoy.
El tiroteo empezó muy temprano y duró hora y media. "Cientos de enemigos atacaron el puesto fronterizo desde cuatro direcciones", informó el portavoz del Ejército para el este de Afganistán, Noman Atefi. Otros 14 soldados consiguieron mantener la posición ante el asedio, continúa Atefi, desmintiendo la versión inicial dada por los talibanes según la cual se habría destruido completamente el puesto de control. Las autoridades han informado también de un ataque suicida con bomba contra los refuerzos enviados al puesto fronterizo, que no ha causado nuevas bajas. Los talibán han reivindicado el ataque en un correo electrónico en el que califican a las tropas afganas de “mercenarios”.
Escalada de insurgencia
Los talibanes han intensificado los ataques contra el ejército afgano, al ir tomando este más responsabilidad en la lucha contra la insurgencia debido a la paulatina retirada internacional, que debería estar concluida antes de final de año. En lo que va de año son ochenta y cuatro los soldados afganos abatidos por los muyahidines.
El ataque es el mayor golpe talibán a las fuerzas de seguridad afganas desde que el pasado septiembre los insurgentes mataron a 18 soldados y policías en una emboscada en el norte del país. Y llega tras los fracasados intentos del Gobierno afgano para alcanzar un acuerdo con ellos que frene los enfrentamientos en el país. Esta semana, además, la prensa estadounidense había publicado que su gobierno negociaba con los talibanes afganos un canje de presos, algo que, sin embargo, las autoridades militares estadounidenses negaron.
LGC (dpa, reuters, ap)