Atentado explosivo en Túnez
30 de octubre de 2013Un hombre se inmoló este miércoles (30.10.2013) en Túnez haciendo estallar los explosivos que portaba consigo en una playa ubicada frente al Hotel Palm, un alojamiento de cuatro estrellas en la ciudad turística de Susa. La policía detuvo a otro posible atacante en Monastir, cerca de la tumba del ex presidente Habib Bourguiba. El atentado, atribuido a islamistas radicalizados, no dejó víctimas. De comprobarse las primeras especulaciones, sería el primer atentado con motivos religiosos contra un objetivo turístico tunecino desde el año 2002.
Testigos presenciales comentaron que se vivieron momentos de pánico en el hotel de lujo. Según la televisora El Wataniya 1, al atacante se le había negado el acceso a la zona del hotel. Tras ser repelido por efectivos de seguridad, el sujeto, de aproximadamente 21 años, hizo detonar los explosivos. "Sin duda habrá repercusiones para el turismo. De todas formas, nos satisface saber que ningún turista murió o resultó herido, porque el impacto sería desastroso", dijo Salwa Kadri, responsable del área de turismo de la región.
Un suceso que trae malos recuerdos
Se intuye que el atentado puede haber sido preparado como represalia por las últimas acciones de las fuerzas de seguridad contra grupos islámicos radicalizados; acciones que le costaron la vida a varias personas en semanas recientes. El último ataque contra un objetivo turístico en Túnez se registró hace once años, cuando un camión cargado con explosivos fue detonado frente a una sinagoga en la isla de Djerba y provocó la muerte de 14 turistas alemanes, tres tunecinos y dos franceses. Al Qaeda se adjudicó la responsabilidad por ese atentado.
La sociedad tunecina conserva esas fechas en la memoria porque los ataques explosivos son poco frecuentes en el país magrebí. No obstante, se cree que los extremistas islámicos tunecinos han aprovechado elcaos que prevalece en la vecina Libia para comprar armas y entrenarse en el uso de ellas.
A principios de 2013, el Gobierno tunecino inició una ofensiva contra Ansar al-Sharia, una de las organizaciones más agresivas que han surgido tras las revueltas populares de 2011. Un miembro de Al Qaeda, con experiencia de combate en Afganistán, lideraría ese grupo. A principios de octubre, nueves policías tunecinos perdieron la vida al enfrentarse con islamistas radicalizados.
ERC ( dpa / Reuters )