Bayern: tres equipos en uno

Pese a su empate del fin de semana pasado ante el Fráncfort, el Bayern continúa invicto en las 11 jornadas jugadas de la Bundesliga. Su ventaja ante el segundo, el Dortmund, es de cinco puntos; al tercero, Wolfsburgo, le lleva 10 puntos; del cuarto y el quinto -Schalke y Gladbach y- lo separan 11 y 13 puntos respectivamente. El dominio bávaro, que es abrumador, radica en el poderío de su plantel de jugadores.

Una estrella reemplaza a otra

Ningún equipo en Alemania -y muy pocos en el resto del mundo- se puede dar el lujo del Bayern que en el banco de suplentes sienta en cada juego a futbolistas que en cualquier otro lugar serían titulares. Contra Fráncfort, por ejemplo, fueron sustitutos Thomas Müller, Thiago Alcántara y David Alaba.

Adicionalmente,con los jugadores que están lesionados (Franck Ribéry, Mario Götze, Holger Badstuber, Sebastian Rode o Juan Bernat), junto a aquellos talentos que no logran ingresar a la convocatoria (Sinan Kurt o Gianluca Gaudino), cualquier otro club de la Bundesliga estaría en capacidad de hacer un equipo nuevo que podría darle la pelea de tu a tu al Bayern.

Esto habla de la riqueza y la calidad de una plantilla con mucho fondo que -pese a lo que a veces se sostiene- ni se construyó de un día para otro, ni tampoco es solamente resultado de la capacidad económica del Bayern para actuar en el mercado de jugadores usando tanto su dinero, como su reputación para convencer a los mejores de llegar a Múnich.

Fichajes clave

Para confirmar la inteligente política de fichajes del Bayern, basta revisar las contrataciones hechas por el club para esta temporada. Douglas Costa, por ejemplo, era prácticamente un desconocido en la gran tribuna del fútbol internacional al llegar a Múnich. Un par de partidos más tarde el brasileño ya era una estrella mundial, y todo por apenas 30 millones de euros.

Lo mismo vale para el francés Kingsley Coman, quien junto con Costa ha revitalizado el juego por las bandas del Bayern. Los dos están previstos para reemplazar a mediano plazo a la histórica dupla Arjen Robben – Franck Ribéry. Aún así, estos dos jugadores todavía están en el plantel, lo que significa que en la práctica el entrenador Pep Guardiola no tiene solo dos excelentes jugadores para esas posiciones claves, sino cuatro de elevada calidad deportiva.

Ese fenómeno no es nuevo. Desde que llegó Pep Guardiola a Múnich cada posición en el equipo se ha ocupado con dos, y hasta tres jugadores, de primer nivel. Además, a los futbolistas se les ha exigido flexibilidad, lo que se traduce en que hay quienes -como es el caso de David Alaba o Javi Martínez- están en capacidad de cubrir más de un puesto y desempeñar más de un trabajo en la cancha.

Todo esto se ha logrado a relativamente bajos costos. No hay que olvidar que el Bayern ha gastado en fichajes apenas 200 millones de euros en las últimas tres temporadas. Eso pese a que las nuevas contrataciones han incluido los famosos nombres de Mario Götze, Robert Lewandowski, Xabi Alonso, o Arturo Vidal, para citar solo algunos.

Para entender mejor la dimensión real de estas inversiones, y su utilidad, basta comparar los gastos del Bayern con los del Manchester City, que esta temporada desembolsó mucho más que los alemanes en los tres años recientes: 203 millones de euros. La diferencia es que mientras los ingleses lideran la PremierLeague perseguidos por cuatro rivales a los que escasamente les aventaja por cinco puntos, en la Bundesliga el club de Múnich va casi que de paseo, y rotando a una plantilla de jugadores que luce siempre fresca gracias a que todos tienen oportunidad de descansar.

Así las cosas, es claro que arroja resultados cuando un club cuenta con un plantel en el que tiene más de un equipo a disposición. Bayern es el nuevo modelo de los grandes protagonistas del fútbol internacional.