Bin Laden habla de nuevo
23 de abril de 2006
En un mensaje de audio difundido por la cadena qatarí de televisión por satélite Al Yazira, Bin Laden también sostiene que otro ejemplo de esa guerra "es lo que pasa en Irak, Pakistán, Chechenia y Sudán". El terrorista más buscado del mundo ha vuelto a hablar. En un discurso que no varía, Bin Laden vuelve a dar su particular visión de los conflictos mundiales que se relaciona siempre con el enfrentamiento religioso y la lucha occidental por erradicar el pensamiento islámico.
Sudán y los ejércitos occidentales
En la grabación, el líder terrorista insta a los "Muyahidín" (combatientes islámicos) a que se preparen para una "larga guerra contra los cruzados" en la región de Darfur, en el oeste de Sudán. Bin Laden critica los acuerdos de paz firmados entre Jartum y los rebeldes del sur sudanés porque, a su juicio, tienen por objetivo separar la parte meridional de Sudán. Asimismo, acusa a Estados Unidos de "aprovecharse de las diferencias entre las tribus" [en Darfur] para intentar atizar el conflicto civil en la región y "robar el petróleo sudanés".
Bin Laden se refirió a su anterior llamamiento a una "tregua" con occidente a cambio de la retirada de las tropas de los países islámicos y consideró que la negativa occidental significa que "insisten en seguir adelante con la campaña de los cruzados contra nuestra Nación, ocupar nuestras tierras, apoderarse de nuestras riquezas y convertirnos en esclavos".
También consideró que los pueblos occidentales "comparten con sus respectivos gobiernos la responsabilidad de la guerra contra el Islam, pues esa guerra continúa y esos pueblos renuevan su apoyo a sus gobernantes y sus señores". "Ellos [los pueblos occidentales], envían a sus hijos a los ejércitos para que nos combatan, y dan su apoyo moral y financiero [a sus gobiernos], mientras que se incendian nuestros países, nuestras casas se bombardean y nuestros pueblos son masacrados", añadió.
Caricaturas: los infieles deben ser castigados
El líder de Al Qaeda se refirió también a crisis provocada por las caricaturas de Mahoma y pidió que los responsables de su publicación sean castigados. "Los infieles están despreciando nuestra religión", consideró.
A los religiosos musulmanes que se expresaron a favor de un diálogo con occidente tras la crisis de las caricaturas, Bin Laden los calificó de "derrotistas que se han ido a verles [a los occidentales] como negociadores en lugar de ir como combatientes".