¿Cómo asegurarse contra el cambio climático?
21 de julio de 2021Muchas personas en Alemania fueron sorprendidas por las fuertes lluvias y las inundaciones mortales que afectaron a algunas zonas del país a mediados de julio. Ahora, mientras los propietarios de las viviendas hacen el balance de los daños, podría producirse una segunda sorpresa al revisar sus pólizas de seguros.
El seguro de vivienda en Alemania cubre los daños causados por el agua, pero no si se trata de lluvias intensas o inundaciones naturales. Para ello, los propietarios deben tener una cobertura especial contra los daños por fenómenos meteorológicos.
Estas advertencias, que no son exclusivas de Alemania, plantean problemas en un mundo en el que el clima imprevisible se está convirtiendo en la norma. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, el aumento de las temperaturas en el mundo puede provocar un incremento de las precipitaciones, lo que aumenta la probabilidad de inundaciones.
El seguro contra los cambios climáticos es un complemento "urgentemente necesario" para el seguro de vivienda estándar, explica a DW Sascha Straub, abogada financiera que trabaja en una consultora de consumidores en Baviera.
"Los daños que puede causar el agua son tan inmensos que, en última instancia, pueden suponer un completo desastre económico para la persona", asegura Straub. "Y ahora vemos la posibilidad de que también afecte a quienes no han tenido que lidiar con el agua antes", agrega.
El costo de esta cobertura suplementaria varía según la ubicación y el tipo de propiedad, sostiene Straub, y puede oscilar entre el 30% de la póliza de seguro de vivienda estándar hasta el 300% para las propiedades de mayor riesgo. En la actualidad, menos de la mitad de los asegurados en Alemania han optado por esta cobertura adicional.
¿Quién debe pagar la factura?
No todo el mundo está dispuesto a asumir este costo, especialmente aquellos que más lo necesitan. "Los seguros se vuelven menos atractivos para los hogares o agricultores de alto riesgo cuando las primas reflejan el riesgo latente", escribió la Comisión Europea en un informe de 2018 sobre seguros y cambio climático. "Aunque los asegurados de menor riesgo tienen un incentivo más débil para reducir el riesgo, es más probable que compren un seguro ya que las primas son más asequibles".
Algunos prefieren arriesgarse. En caso de catástrofe natural, también se puede esperar que el Estado intervenga. El gobierno alemán ya ha prometido una ayuda rápida a los afectados por las inundaciones.
Pero incluso con la ayuda estatal, no tener el seguro adecuado podría seguir generando problemas. En Baviera, por ejemplo, solo las personas que puedan demostrar que intentaron obtener una cobertura y no la consiguieron pueden recibir ayudas del Estado, según un informe del periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Pero, ¿es justo imponer a los propietarios de viviendas los costos de los seguros contra un clima cada vez más impredecible? Esta es la pregunta que aseguradoras y reguladores intentan resolver actualmente.
Un clima cambiante plantea un dilema técnico a las compañías de seguros, cuyo modelo de negocio se basa en su capacidad para cuantificar el riesgo de que se produzca un evento y asumir el costo en caso de que tenga lugar. Esto significa recaudar suficiente dinero en primas para cubrir el costo de las reclamaciones.
"Estamos en un mundo en el que el riesgo aumenta día tras día porque cada vez hay más carbono en el sistema", dice Dickon Pinner, socio principal de la consultora mundial McKinsey, en el podcast Reimagine Insurance de la empresa. "Así que limitarse a transferir ese riesgo es insuficiente", subraya.
Un nuevo papel para las aseguradoras
Con un modelo de negocio basado en la previsibilidad, las aseguradoras también tienen un incentivo para utilizar su rol especial en la sociedad para guiar la transición hacia el abandono de las fuentes de energía basadas en el carbono.
"A gran escala, se trata de una asignación y reasignación masiva de capital", afirma Pinner. "Pensar en las señales de precios que las aseguradoras pueden enviar para desviar el capital que actualmente se destina a activos de riesgo que promueven aún más el comportamiento de riesgo, en lugar de simplemente transferirlo, es realmente clave porque la creciente marea de riesgo significa que transferir no resuelve el problema", advierte Pinner. Pero, por ahora, la gente tendrá que prepararse lo mejor que pueda para el clima que cada vez es más difícil de predecir.
(ct/er)