“Cincuenta sombras de Grey”: sumisión y reacción
12 de febrero de 2015
La historia que cuenta la autora E. L. James en su libro “Cincuenta sombras de Grey” es muy simple. Una estudiante de literatura de 21 años conoce en una entrevista a un magnate y se hacen pareja. Acá viene lo extraordinario: su relación erótica se convierte en un vínculo sadomasoquista. En el libro, eso es descrito y relatado con mucho detalle. Ahí tenemos una de las razones de su enorme éxito: el sexo vende.
Que Hollywood se aseguraría los derechos de la novela era algo evidente. Los estudios de cine olieron un negocio rentable. No en vano la trilogía vendió millones de ejemplares en todo el mundo. Desde hace un año circulaban en internet los rumores sobre el proyecto cinematográfico, y el primer tráiler ya podía verse hace algunos meses. Este jueves 12 de febrero finalmente la película “Cincuenta sombras de Grey” llegó a los cines. Un día antes había tenido su estreno mundial en el marco de la Berlinale.
Conversamos con Werner Fuld, quien trabaja hace años como crítico de literatura en el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, así como en la revista Focus. Además, hace poco publicó un libro sobre la historia de la literatura erótica. Fuld piensa que hay otras razones que explicarían el éxito de la novela de E. L. James.
“Libro puritano”
Deutsche Welle: Casi al final de su libro “Geschichte des sinnlichen Schreibens” (“Historia de la escritura sensual”), usted señala que “Cincuenta sombras de Grey” no es una novela obscena, sino “un libro muy puritano, vestido en una historia de amor adolescente tardío con rituales de sometimiento femenino”. ¿Podría explicar eso?
Werner Fuld: El libro responde a una pregunta muy antigua, que a las mujeres siempre les ha interesado: ¿cómo enamorar a un hombre rico? Y existe la idea de que ese objetivo se puede alcanzar mediante la sumisión sexual. Es también un producto bastante reaccionario. Al final se espera como recompensa para la muchacha una hermosa casa en los suburbios, con césped y muchos niños.
¿Cómo explica el enorme éxito del libro? ¿Es solo el contenido, con sus detalladas descripciones de prácticas sexuales, o hay otros factores?
Obviamente el éxito de esto solo es posible debido a que los lectores pueden descargar este libro de forma anónima como E-Book, de manera tal que nadie ve qué están realmente leyendo. Y la propaganda boca a boca ha hecho también lo suyo.
En las 500 páginas de su libro usted hace un listado de numerosos títulos con contenido erótico que han tenido un enorme éxito. ¿“Cincuenta sombras de Grey” es solo un eslabón más en esa cadena?
Es otro ejemplo de que el contenido también puede generar una nueva técnica, pues el E-Book no se habría masificado tan rápidamente si no ofreciese algo interesante. Otras novelas eróticas fueron en su tiempo también relativamente exitosas, pero no llegaron a niveles masivos a escala internacional.
Violencia ritual
En su libro, usted describe tres regiones donde la literatura erótica ha triunfado: la italiana, la francesa y la inglesa…
Sí, y de inmediato salta a la vista que falta la alemana.
Exacto. ¿Por qué?
Porque para el surgimiento de una literatura erótica se hace necesaria la libertad. La libertad en el salón, donde los hombres y las mujeres se mueven en igualdad de condiciones y pueden interactuar. Eso ocurrió en esos tres países, pero no en Alemania. En Alemania todo pasó después. Cuando en Italia había Renacimiento, en Alemania había guerra. No existía un idioma nacional. Se escribía en un dialecto determinado. No había mercado de libros. Se escribía solo para un círculo muy cerrado de amigos.
Volvamos a las “Cincuenta sombras”. En el libro, la sexualidad aparece muy vinculada a la violencia. ¿Podría eso también explicar su popularidad?
En “Cincuenta sombras de Grey” la violencia solo se describe dentro de una forma ritual. Y las escenas que vienen en el libro tienen poco que ver con la realidad. Esto fue escrito para las amas de casa estadounidenses. “Mami Porno” se llama eso. Es una violencia ritualizada, que está regulada por contrato y donde nadie resulta herido.
Además, este tema ya fue abordado en clásicos como "Historia de O", por ejemplo.
Sí, claro, todo ya se ha dicho y todo cae rápidamente en el olvido. Por eso un libro como el que yo escribí sirve para que esas tradiciones enterradas y olvidadas vuelvan nuevamente a la memoria.
Werner Fuld: Eine Geschichte des sinnlichen Schreibens, Galiani Verlag Berlin, 538 páginas, ISBN 978-3-86971-098-3.