"Mayoría de sospechosos viene de Marruecos y Argelia"
11 de enero de 2016"Tras alcoholizarse y consumir de drogas, algunos hombres creyeron poder abusar sexualmente de las mujeres que celebraban la llegada del nuevo año en Colonia”, resumió el ministro del Interior del estado de Renania del Norte Westfalia (NRW), Ralf Jäger, los acontecimientos de la víspera del Año Nuevo en la estación central de Colonia. La sesión extraordinaria había sido solicitada por la oposición que no quedó del todo satisfecha con las explicaciones del político socialdemócrata.
Jäger insistió en que fue la Policía, y no el ministerio del Interior, la que cometió los inaceptables errores que dejaron a cientos de mujeres sin protección de seguridad. La investigación de dicho ministerio concluyó que, prácticamente, “las víctimas fueron dejadas solas porque la Policía destinó muy pocos efectivos para la vigilancia del lugar, a pesar de haber podido pedir refuerzos, sin problemas”. Jäger dijo además, que haberle exigido el retiro al jefe de la Policía de Colonia, Wolfgang Albers, sigue siendo una medida adecuada.
"Abandonadas por la Policía"
Los incidentes del Año Nuevo en la estación central de Colonia han causado estupor en todo el mundo. Según la Policía, de una multitud de cerca de 1.000 hombres, salieron grupos que encerraron, manosearon y robaron a cientos de mujeres. Una situación dramática para las víctimas, dice el mismo informe. Los agentes de seguridad, sin los efectivos necesarios para controlar la situación, tuvo que presenciar los abusos sin poderlos evitar. “Un hecho que ha minado la confianza de las víctimas y la población en la Policía, dañando significativamente su reputación”, expresó el inspector en jefe de la Policía de NRW, Bernd Heinen. Entretanto, más 500 mujeres han puesto la denuncia que no pudieron elevar la noche de los hechos, por falta de atención. Entre las denuncias se cuentan 240 casos de abuso sexual.
Sospechosos, peticionarios de asilo
Hasta ahora, 19 personas, ninguna de ellas con nacionalidad alemana, se cuentan entre los sospechosos, dijo el director de la oficina de investigaciones criminales de NRW, Dieter Schürmann. Diez de ellos son “solicitantes de asilo” llegados a Alemania en el último trimestre de 2015. Otros nueve sospechosos viven ilegalmente en Alemania y 14 de los 19 sospechosos provienen de Marruecos y Argelia.
La policía de Colonia actuó de una forma “desafortunada” al no informar, desde un principio, sobre los graves acontecimientos. Un error que ha sido instrumentalizado sobre todo por la ultraderecha, que la acusa que haber querido “proteger a los refugiados”.
Jäger reconoció que el total esclarecimiento de los delitos es “extremadamente difícil, debido al alto número de potenciales delincuentes” y advirtió que quien vincule directamente a los refugiados con los hechos de violencia en Colonia le abona el terreno a los extremistas de derecha.
¿Venganza por los abusos de Año Nuevo?
A propósito, Colonia registró el domingo una serie de ataques xenófobos. "Fueron delitos racistas. Un grupo de personas se reunió a través de las redes sociales con el objetivo de perseguir a los que parecieran no ser alemanes", indicó Norbert Wagner, de la Policía de Colonia, agregando que "esta es una señal alarmante, que nos tomamos muy en serio".