Comisión Europea de Von der Leyen tendrá un 40 % de mujeres
17 de septiembre de 2024La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentó su nuevo colegio de comisarios -uno por cada uno de los 27 Estados miembros- en el Parlamento Europeo en Estrasburgo, en el este de Francia.
El equipo incluye a 11 comisarias y 16 comisarios; 40 % de mujeres y 60 % de hombres, tras varias semanas de controversia sobre el tema. La política alemana, que deseaba un equipo paritario para su segundo mandato frente al Ejecutivo europeo, explicó que las propuestas iniciales de los 27 Estados miembros le daban a las mujeres apenas un 22% de los cargos del brazo ejecutivo de la UE.
"Era completamente inaceptable", destacó Von der Leyen en el Parlamento Europeo en Estrasburgo, Francia, añadiendo que, pese al avance logrado en las negociaciones de las últimas horas, "queda mucho trabajo por hacer".
16 comisarios y 11 comisarias
En un intento de responder a las críticas, cuatro de las seis vicepresidencias de la Comisión son concedidas a mujeres, en particular a la socialista española Teresa Ribera.
Ribera, una política ambientalista con amplia experiencia en negociaciones climáticas internacionales, hereda una cartera dedicada a la transición ecológica, con amplias atribuciones y con rango de vicepresidencia ejecutiva. La socialista, que desempeña esa misma cartera en el actual ejecutivo español, se perfila como uno de los pesos pesados de la nueva Comisión.
"Es una magnífica noticia para Europa y un orgullo para nuestro país", reaccionó el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. "Con tu nombramiento, España logra la mayor cota de influencia que ha tenido nunca en Bruselas, y la UE gana a una líder excepcional", agregó.
Los comisarios propuestos por la líder conservadora alemana deberán todavía someterse a audiencias ante los eurodiputados en una fecha por definir, y a un voto de aprobación antes de asumir sus funciones. En algunos casos. el examen se anuncia complicado.
Al menos una audiencia difícil pendiente
Uno de ellos es el italiano Raffaele Fitto, ministro de Asuntos Europeos del Gobierno ultraderechista de Giorgia Meloni, cuyo nombre sentó mal en el centro y la izquierda del tablero político europeo.
Von der Leyen lo propone como uno de los vicepresidentes ejecutivos y responsable de la cartera de Cohesión y Reformas, competente en la cuestión del desarrollo de las regiones europeas menos favorecidas.
El partido de Meloni y Fitto, Hermanos de Italia, fue el más votado en su país en las elecciones europeas de junio, y la dirigente había venido empujando para que uno de los suyos tuviera un papel relevante en las instituciones europeas. La propuesta de Von der Leyen reafirma "el rol central" de Italia en la Unión Europea, dijo Meloni.
Por su lado, el ministro saliente de Exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, fue propuesto como "vicepresidente ejecutivo para la Prosperidad y la Estrategia Industrial", cumpliendo el guión esperado desde que el lunes renunciara por sorpresa Thierry Breton, al que se daba por seguro en ese cargo, pero entró en conflicto con Von der Leyen.
Igualmente, el ex primer ministro lituano Andrius Kubilius fue propuesto como comisario de Defensa y del Espacio, un cargo de creación nueva, en el contexto de la guerra de Ucrania. Estará a cargo de reforzar la política de defensa del bloque, pero quedan por precisar las responsabilidades de su cargo y qué medios tendrá para ejecutar sus funciones.
Ejercicio de equilibrio por la "prosperidad, seguridad y democracia"
La UE vive un momento delicado a nivel geopolítico, entre la invasión rusa de Ucrania, la competencia económica de China y la incierta campaña presidencial en Estados Unidos. Y la composición del nuevo Ejecutivo es un ejercicio delicado, que refleja el peso de cada Estado miembro y de los equilibrios políticos internos en Bruselas.
Von der Leyen insistió en la necesidad de alcanzar una economía "competitiva, circular y descarbonada", siguiendo un reciente informe del expresidente del BCE Mario Drahi sobre los desafíos económicos de la Unión; así como en tres pilares de su trabajo, de cara a los cinco años próximos: "prosperidad, seguridad y democracia".
Tres meses después de unas elecciones al Parlamento Europeo marcadas por el auge de la extrema derecha, la izquierda y numerosas oenegés temen que la Comisión esté muy centrada en cuestiones económicas, en detrimento de la agenda climática.
"Tenemos que seguir afrontando este desafío de la lucha contra el calentamiento climático", pero "siempre en un contexto de competitividad", dijo diplomáticamente Von der Leyen, miembro del PPE, el grupo de centro derecha que concentra la primera fuerza del Parlamento europeo.
rml (afp, efe)