El arte revive después del terremoto
3 de abril de 2011El terremoto de la madrugada del 27 de febrero de 2010 dejó a gran parte de Chile en el suelo. Los daños no fueron mayores porque, siendo un país sísmico, los estándares de construcción son altos. Además, cada cierto tiempo, algún temblor más fuerte de lo común echa abajo lo que no resiste los movimientos de la tierra, y así se mantiene en pie sólo aquello que es más sólido y firme.
Pero aún así, nadie estaba preparado para los 8,8 grados y para el posterior tsunami que arrasó con varios pueblos costeros. Se tuvo que lamentar la muerte de más de 520 personas, doscientas mil casas resultaron destruidas o con graves daños, y hospitales, escuelas e iglesias quedaron inutilizables.
El mundo de la cultura también sufrió pérdidas. A menos de un mes de ocurrido el terremoto, la Dirección Nacional de Archivos y Museos, DIBAM, anunciaba que 75 edificios catalogados como “bienes patrimoniales” tenían daños cuantiosos en su estructura. El plan de reconstrucción debería involucrar al Estado, la empresa privada y expertos extranjeros. Era imposible asumir solos la tarea.
Dando una mano…
Uno de los edificios afectados fue el Museo de Arte Contemporáneo, MAC. Su sede del barrio Quinta Normal resultó con serios daños que la dejaron inhabitable y la obligaron a cerrar. “Pocos días después del terremoto llegó a Chile el Ministro de Relaciones Exteriores alemán, Guido Westerwelle, y vimos de qué modo podía Alemania ayudar a Chile de manera solidaria” relata el consejero de Asuntos Culturales de la Embajada alemana en Santiago, Christoph Dorschfeldt. “Además de entregar ayuda humanitaria, el ministro también quería ayudar al sector cultural”, agrega.
De ahí surgió la idea de cooperar en la restauración del MAC. A juicio de Dorschfeldt este museo “es uno de los grandes del país y un museo de excelencia, con una larga trayectoria de cooperación con Alemania”. Además de ser un espacio de expresión y encuentro de las corrientes artísticas de vanguardia, el mismo edificio, construido en 1920, es muy valioso.
“Este edificio fue declarado Monumento Nacional en la categoría de Inmueble de Conservación Histórica, por lo tanto tiene un enorme valor patrimonial para Chile”, explica Verónica Rubio, del MAC. “La generosa donación del gobierno de la República de Alemania permite la continuidad de las actividades de esta sede”, indica.
A través del Programa de Conservación Cultural del Ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania, el MAC recibió una donación especial de 250 mil euros en septiembre del año pasado. Con ello se repararon grietas estructurales y superficiales, se arregló la techumbre, se pintó completamente el edificio y se reemplazaron los vidrios de los tragaluces. En cada uno de estos trabajos se integraron nuevas tecnologías y modernos materiales que permiten reducir la humedad, proteger mejor las obras expuestas y reducir el impacto de un futuro terremoto.
Un socio para preservar la cultura
Uno de los objetivos de este Programa del gobierno alemán es ayudar a los países en desarrollo a construir un sentimiento de identidad nacional, así como promover el diálogo intercultural. Entre 1981 y 2010, fueron entregados para más de 2.350 proyectos en 142 países unos 50,2 millones de euros.
“Después de un desastre natural, como el terremoto ocurrido en Chile, el apoyo humanitario, técnico y logístico es de la máxima importancia. La reconstrucción se centra primero en edificios administrativos, hospitales, escuelas, etc. Sin embargo, la preservación del patrimonio cultural también es importante”, explica un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores alemán.
“La destrucción de un edificio o un monumento que representa la identidad de un pueblo o de un grupo étnico sería una gran pérdida –agrega-. Ésta fue la razón por la cual el Ministerio de Relaciones Exteriores apoyó la reconstrucción del Museo de Arte Contemporáneo en Santiago de Chile en el marco del Programa de Preservación Cultural”.
En Latinoamérica, el Programa ha financiado diversos proyectos. En Bolivia, por ejemplo, fue restaurada la iglesia de Curahuara de Carangas, una modesta construcción de 1608, que en su interior esconde un tesoro artístico e histórico: Sus paredes y cielo están decorados con frescos que le han hecho ganarse el apelativo de “la Capilla Sixtina del Altipano”.
En Santiago de Chile, después de un año cerrado, el MAC Quinta Normal reabre sus puertas este mes de abril con exposiciones que dan cuenta de su labor como espacio de reflexión y difusión de las corrientes artísticas actuales. Entre ellas, la muestra “GMP Diseñando en Diálogo - La Arquitectura de von Gerkan, Marg und Partner”, una selección de los trabajos más destacados del renombrado estudio alemán de arquitectura GMP.
Autora: Victoria Dannemann
Editora: Claudia Herrera Pahl