Condoleezza Rice en Alemania: armonías y disonancias
4 de febrero de 2005
Alemania y EE.UU. están abriendo "un nuevo capítulo" en sus relaciones, dijo Rice en su visita de presentación a Berlín el viernes, luego de conversar una hora con Schröder.
La presencia de la Secretaria de Estado es parte de los preparativos para la visita de Georg W. Bush a Alemania el 23 de febrero.
Rice destacó los valores comunes de Alemania y EE.UU. Con referencia a las diferencias de opinión entre ambos países en relación con la guerra de Irak, dijo que ahora ha llegado la hora de la diplomacia, a efectos de estabilizar y reconstruir Irak.
Schröder no la contradijo, sino que, por el contrario, manifestó que Alemania "coincide en que ahora de lo que se trata es de dar a Irak una perspectiva democrática y de estabilidad, independientemente de cuáles eran nuestras respectivas posiciones con respecto a la guerra".
Agregó que Alemania continúa dispuesta a realizar aportes en ese sentido. El portavoz del Gobierno, Béla Anda, había, no obstante, descartado antes nuevamente la posibilidad de que Alemania enviara soldados a Irak.
Irán: ¿por la razón o por la fuerza?
En cuanto a Irán, Schröder dijo que Alemania seguirá esforzándose, junto con Francia y Gran Bretaña, para impedir por medios diplomáticos que Irán desarrolle armas nucleares.
"La cuestión de los instrumentos" para lograr ese fin, sin embargo, debe seguir discutiéndose, agregó, en alusión a que Washington no está muy convencido de los medios diplomáticos.
Los EE.UU. recientemente no descartaron la opción militar, si bien Rice manifestó después de la reunión con Tony Blair el jueves en Londres que una acción militar "no está en el orden del día actualmente".
En relación con el Medio Oriente, Rice dejó claro que EE.UU. no tomará por ahora la iniciativa en el proceso de paz.
Si bien viajará para conversaciones a Jerusalén y Ramalá, no participará en la cumbre israelí-palestina que tendrá lugar los días 1 y 2 de marzo en Londres.
Afganistán: no alemán a misiones de combate
Entre los temas de conversación con Schröder estuvo también el deseo norteamericano de unificar las misiones de lucha contra el terrorismo (Enduring Freedom) y de paz y estabilización (ISAF) en Afganistán.
El Gobierno alemán ve con escepticismo la idea. Schröder dijo al respecto diplomáticamente sólo que Alemania "no tiene intención de introducir modificaciones" en sus compromisos militares en Afganistán.
Según la revista Der Spiegel, la propuesta de EE.UU. no expresa otra cosa que el deseo de Washington de retirar los más posibles de los 10.000 soldados que tiene estacionados en Afganistán, seguramente para enviarlos a Irak.
Ello supondría para quienes los sustituyan tener que realizar operaciones militares contra los grupos que operan en las montañas y asumir mayores responsabilidades de combate. El canciller alemán lo rechaza.
El ministro de Relaciones Exteriores, Joschka Fischer, y el de Defensa, Peter Struck, están buscando ahora una fórmula de compromiso.