Cuota de admisión
2 de abril de 2008El Badische Zeitung, de Freiburg, se concentra en los planes que promueve Estados Unidos para una ampliación extensa de la OTAN: “Washington ve en cualquier país de Europa del Este un socio potencial dentro de la alianza atlántica, aún si ello incomoda a socios antiguos como Alemania y Francia. Esta postura es digna de alabanza. Los países que antes estuvieron sometidos al yugo soviético aceptan hoy a Estados Unidos como una potencia superior en la lucha por la paz y la libertad. Temen mucho más a la Rusia de Putin que, por ejemplo, la canciller alemana. Pero al forzar el ingreso de nuevos socios, el presidente Bush pasa por alto las consideraciones estratégicas de los europeos occidentales. Éstos desean evitar una confrontación con Rusia. Así que, por lo menos, la OTAN debiera dejar en claro cómo pretende relacionarse con los rusos antes de considerar el ingreso de Georgia o Ucrania.”
Cuota de admisión
El Rhein-Neckar Zeitung, de Heidelberg, opina lo siguiente sobre este tema: “Quien desee convertirse en socio del club de la OTAN, debe pagar por la admisión: reformas democráticas internas y reestructuración de las fuerzas armadas. Aquí, tanto Georgia como Ucrania presentan graves carencias. Un rechazo por parte de la alianza, que también representa a países como Alemania, debiera estar justificada. Pero de ninguna manera debiera tratarse de una negativa irreversible. La puerta sigue abierta para Kiev y Tifilis. El impacto de la negativa preliminar debe bastar para impulsar las reformas necesarias.”
A todo galope
Desde Turín, Italia, La Stampa se refiere a cómo el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, busca fórmulas para que su país reingrese de lleno a la OTAN: “El mandatario está convencido de que la comunidad internacional pasa por un momento decisivo, y que se resquebraja el control total del mundo que Washington había adquirido luego de la guerra en Irak. Sarkozy quiere llenar a todo galope este vacío, aunque en etapas bien resguardadas. La iniciativa no debe ser exagerada, porque si no, podría confundirse con la pérdida de independencia. Es por ello que Sarkozy quiere darse el lujo de decir que no de vez en cuando a la OTAN, como en el caso de Georgia y Ucrania.”
Miseria de la OTAN
En Copenague, el periódico danés Information dice sobre la cumbre de Bucarest: “La responsabilidad por la miseria en que se encuentra la OTAN recae tanto en Estados Unidos como en los aliados más fieles de éstos en Europa. Se les conoce como 'aliados de primera clase', que se mostraban ansiosos por demostrar cómo la misión en Afganistán serviría de modelo para perpetuar la existencia de la alianza atlántica. Pero no han conseguido imponerse a los colosales y complejos retos que implica una nación islámica muy lejana, en la cual priva la guerra desde hace un cuarto de siglo. La mejor posibilidad para que progrese la misión de la OTAN en Afganistán consiste en renunciar al protagonismo y abrir las puertas para que las Naciones Unidas se hagan cargo de la situación.”