Decapitan a Hitler en Berlín
5 de julio de 2008Un hombre arrancó la cabeza de la figura de cera de Adolfo Hitler en la jornada de su presentación en el museo Madame Tussauds de Berlín. Apenas unos minutos después de que abriera el museo, un hombre de 41 años empujó a dos guardias de seguridad que vigilaban la figura y le arrancó la cabeza en protesta por su exhibición.
Al grito de “nunca más guerra” el habitante del multicultural barrio berlinés de Kreuzberg ejecutó lo que muchos otros pensaron, y le arrancó la cabeza al "Führer". Y es que la exposición de Hitler en cera generó duras críticas entre la opinión pública alemana. El hombre que acabó de momento con la presencia del máximo responsable del Holocausto y líder del nacional socialismo alemán, fue arrestado por la policía que abrió en su contra un sumario por daño en cosa ajena y lesiones personales.
¡¿Junto a Merkel y Schröder?!
La figura de cera de Adolfo Hitler aparecía con un traje gris y mirando hacia el suelo con aire abatido, uno de los brazos estirados sobre una mesa de madera de gran tamaño y junto a una pared en la que se ve un mapa de Europa, en un lóbrego búnker en los últimos días de la Segunda Guerra Mundial.
Desde su presentación a la prensa el jueves pasado no cesaron de caer críticas. Muchos políticos locales habían calificado como un hecho de mal gusto la presencia de la figura de Hitler en la exposición. Había consenso en considerar inadecuado mostrar al dictador nazi que comenzó un conflicto bélico en el que murieron millones de personas y que ordenó la exterminación de los judíos en Europa, hombro a hombro en un museo en el que aparecen famosos, estrellas de la música y de otras artes, estadistas y héroes del deporte.
La filial del Museo Tussaud en Berlín es la tercera en Europa, después de la de Londres y Amsterdam, y la octava en el mundo. La exposición permanente reúne 75 figuras de personalidades de la política, la cultura, el deporte y el espectáculo como la canciller Angela Merkel o los ex cancilleres Helmut Kohl y Gerhard Schröder, el escritor Günter Grass, ex futbolistas como Uwe Seller o Franz Beckenbauer y estrellas de la música como Nina Hagen.
200.000 euros en cera marrón
Los responsables del museo se defendieron diciendo que Hitler pertenece a la historia alemana y que además la figura lo muestra ya en la época de su decadencia, encerrado en su búnker y rodeado por el estruendo de bombas aliadas, lo que no se presta para que pueda crearse un culto por parte de ultraderechistas.
En Alemania, es ilegal mostrar símbolos nazis y arte que glorifique a Hitler, por lo que a diferencia del resto de las figuras del museo, la de Hitler no puede ser tocada ni fotografiada, según las reglas impuestas por los organizadores.
Se dispuso de cámaras de vigilancia y funcionarios del museo para detener cualquier conducta inapropiada. Discretas señales pedían a los visitantes abstenerse de tomar fotografías o posar junto a Hitler "por respeto a los millones de personas que murieron durante la Segunda Guerra Mundial".
Natalia Ruoss, portavoz del Museo Tussaud en Berlín no quiso decir si la figura de Hitler volverá a ser parte de la exposición. Señaló que eso depende en parte de la magnitud del daño que se le ha causado. Unas 25 personas trabajaron durante cuatro meses en la representación del “Führer” utilizando más de 2.000 fotografías y piezas de archivo, y guiándose por un modelo de Hitler en el Madame Tussauds de Londres. El valor de la figura se estima en 200.000 euros.