Descubren informe soviético sobre Hitler
17 de marzo de 2005Nadie conoció a Adolfo Hitler mejor que Heinz Linge y Otto Günsche, asistente personal y edecán del dictador, respectivamente. Ambos hombres estuvieron a su lado cuando éste se encontraba encumbrado como Comandante Supremo del ejército nazi y lo asistieron en su momento más desesperado, poco antes de la capitulación alemana. En cuanto fueron capturados como prisioneros de guerra a principios de mayo de 1945, se convirtieron en botín de guerra. Fueron obligados a revelar todo lo que sabían sobre el dictador. El contenido del informe recabado por los servicios secretos soviéticos hace 60 años fue publicado en un libro titulado “Hitler”.
Informe de 413 páginas
Heinz Linge y Otto Günsche fueron interrogados a lo largo de varios años. De rehusarse a hablar, serían ejecutados como criminales de guerra. Sus captores los interrogaban a punta de golpes y amenazas, a menudo por las noches, cuando estaban cansados.
Los agentes soviéticos anotaban detalladamente todo lo que los prominentes prisioneros revelaban sobre la vida del dictador. Sobre su relación con Eva Braun, sus comentarios sarcásticos sobre Hermann Göring, su ataque de ira tras la huida de su delfín, Rudolf Hess. Josef Stalin, había ordenado los interrogatorios con la intención de saber todo sobre el hombre que había causado tantas muertes y destrucción en la Unión Soviética, atacada en 1941. El resultado fue un informe de 413 páginas.
Hess negoció a espaldas de Hitler
“Lo interesante es que contiene información sobre la cual no se tenía ningún testimonio”, dice Henrik Eberle, quien junto con el historiador Matthias Uhl del Instituto de Historia Contemporánea, hizo traducir el documento al alemán y estudió su contenido. Aunque los detalles sobre la vida privada del dictador resultan casi banales, no así otro material que tiene valor histórico como el testimonio sobre el viaje a Inglaterra de su delfín Rudolf Hess.
En mayo de 1941 Hess se lanzó en un paracaídas desde un avión de combate, para negociar supuestamente con los británicos la rendición de Alemania. Historiadores discutieron durante años sobre si esto había sido realizado con el conocimiento y la autorización de Hitler o sin ella. El documento prueba que se trató de una iniciativa de Hess en solitario. “Hitler no estaba al tanto de los propósitos de su vicecanciller. Cuando se enteró perdió los estribos", dice Eberle.
Banalidades sobre su vida privada
Un pasaje que cita el diario sensacionalista bild, describe una escena en la que Hitler se reúne con su amante, Eva Braun. Cuando escucha la voz de ella sale a su encuentro y la conduce con ánimo alegre hasta su estudio donde le han preparado chocolate caliente, té, cognac, chocolates, fruta y champagne. Ambos pasan horas dentro de la habitación y se escucha como caminan de un lado a otro, sin embargo no pasan la noche juntos, mientras que Hitler se retira a sus aposentos después de leer el diario de la noche, Eva Braun es conducida a otra habitación.
Günsche y Linge fueron interrogados inicialmente para averigüar las condiciones de la muerte de Hitler, pero los interrogatorios se extendieron hasta formar una imagen completa del período del dictador al frente del poder e incluso sobre su vida privada.