Deutsche Bank: temores exagerados por déficit en EEUU
26 de noviembre de 2004Los temores por el elevado déficit por cuenta corriente de EEUU y la creciente deuda externa generada son exagerados y no son ningún motivo de preocupación, se lee hoy en un análisis del banco alemán Deutsche Bank.
La causa principal del continuado déficit comercial estadounidense es la diferencia de crecimiento entre Estados Unidos y otras regiones, puesto que ese país tiene un mayor ritmo de expansión económica por factores demográficos y la evolución de la productividad, asegura el estudio publicado hoy.
El documento considera posible que una prolongada y profunda recesión de la primera economía mundial puede contribuir a desencadenar una reducción del déficit comercial y de servicios, pero las consecuencias de este proceso serían mucho más graves que el actual extremo déficit.
El Deutsche Bank cree que este déficit muestra la fortaleza y no la debilidad de la economía norteamericana y que incluso dejando de lado las diferencias de crecimiento, la balanza de pagos de EEUU sería deficitaria.
Agrega que los factores decisivos que influyen sobre el déficit comercial son la alta elasticidad de los precios de las importaciones, el aumento de la cooperación industrial y la deslocalización, y el papel del dólar como la mayor divisa
internacional empleada como reserva.
El informe señala que otra causa que resta importancia al déficit es que la financiación de la deuda pública de EEUU, cuyo 70 por ciento procede de bancos centrales extranjeros, es relativamente estable y tiene un bajo o ningún coste financiero.
Además, el estudio advierte de que la depreciación del dólar frente al euro y otras monedas relevantes apenas conducirá a una reducción del déficit de la balanza de pagos, pero sí que puede poner en peligro su financiación.
Deutsche Bank rechaza las tesis comúnmente esgrimidas de que la financiación de la creciente deuda externa de EEUU puede convertirse en un problema con el tiempo y de que una masiva caída del dólar contribuiría a una mejora de la balanza de pagos.
También cita al presidente de la Reserva Federal estadounidense, Alan Greenspan, quien últimamente ha amonestado que el déficit comercial no puede continuar creciendo sin límites, pero añade que él tampoco ha dado una fecha sobre cuándo debe dejar de crecer.
Para 2004, Deutsche Bank prevé un saldo negativo en cuenta corriente de EEUU de 607.000 millones de dólares (465.500 millones de euros), un 5,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del país, frente al 4,9 por ciento de 2003.
Estos valores son récord, tanto en términos históricos relativos como absolutos.
Sobre la actual debilidad del dólar, el informe del instituto germano contradice la opinión generalizada de que se debe, sobre todo, al enorme déficit comercial acumulado y se pregunta retóricamente cómo es posible que entre 1995 y 2001 el billete verde se apreciara tanto mientras el déficit de EEUU casi se cuadruplicó.
Los principales factores de la depreciación del dólar entre 2001 y 2004, según los expertos del banco germano, son: el gran diferencial de tipos de interés entre EEUU, que bajaron al mínimo en 40 años, hasta el 1 por ciento, y los demás países industrializados.
Otros factores fueron los sucesos del 11 de septiembre de 2001 y el temor permanente a nuevos atentados terroristas y el cambio de postura del presidente, George W. Bush, sobre un dólar fuerte respecto a su antecesor, Bill Clinton.
Concluye que el problema del déficit, si realmente lo es, apenas podrá solucionarse con una depreciación del dólar, lo que puede decepcionar a los que apoyan esta hipótesis, y advierte de que un dólar más débil puede incluso tener repercusiones negativas para la economía de EEUU.