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Dirk Nowitzki: el máximo deportista de Alemania

Maximilian Hofmann
8 de marzo de 2017

Dirk Nowitzki se convirtió en uno de los únicos seis jugadores en la historia de la NBA que han anotado más de 30.000 puntos a lo largo de su carrera. Un logro increíble, considera Max Hoffmann.

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USA Dirk Nowitzki überschreitet die 30.000 Marke Jubel
Imagen: Getty Images/R. Martinez

Luego de aquella entrevista de principios de 2011, el autor de este artículo no pudo resistir la tentación de tomarse una foto junto con el camarógrafo Ingo Becker y, naturalmente, con el gran Dirk Nowitzki. Visto desde la perspectiva actual, la imagen parece un tanto curiosa. Nowitzki luce gigantesco, y los demás, demasiado pequeños. Además, ¿qué hacía esa corbata ahí? Y no por último, la foto iba contra todas las reglas de la distancia entre el periodista y el entrevistado.

Dirk Nowitzki  Maximilian Hofmann Ingo Becker
Imagen: DW/I.Becker/M.Hofmann

Pero la gran luminaria del baloncesto alemán no cede terreno a ataques, ni dentro ni fuera de la cancha. Las críticas a su corte de cabello parecen superfluas dados los logros en su carrera deportiva, además de la sencillez y la admiración que este hombre fraguó con tanto cuidado a lo largo de 19 años, principalmente con el equipo de Dallas. Ante todo esto, el periodista apenas puede contenerse y comienza a convertirse en un hincha.

El último récord

Pero volvamos al pasado. 2011 fue el año en el que desapareció Nowitzki y surgió "Dirk”. Los deportistas estadounidenses alcanzan el cénit como superestrellas cuando se les comienza a llamar con apelativos de apenas dos sílabas: Magic, Jordan, Kobe. En 2011, Dirk ganó el título más importante del baloncesto: se coronó campeón de la NBA y fue nombrado Jugador Más Valioso de aquella serie final. Dicho de otro modo: él impulsó a su equipo, los Dallas Mavericks, a conquistar aquel campeonato.

Desde entonces, las cosas se han tranquilizado en torno del gigante rubio que, a sus 39 años, vive el otoño tardío de su carrera deportiva. Romper la marca de los 30.000 puntos es sin duda el último gran logro de su extraordinaria trayectoria. También es el momento perfecto para subrayarlo, dentro y fuera de Alemania: Dirk Nowitzki es en muchos aspectos el deportista más importante de Alemania.

Estas son las razones:

·     Prácticamente solo, él encarna a todo un país dentro de uno de los deportes más exitosos en todo el mundo. Su nombre es sinónimo del baloncesto alemán.

·     Él abrió la brecha para que muchos otros jugadores extranjeros, sobre todo de Europa, llegaran a la National Basketball Association (NBA). Antes de él, los basquetbolistas europeos eran considerados demasiado "débiles” y no eran cotizados al mismo nivel que los estadounidenses.

·     Él revolucionó el baloncesto, primero, al definir una nueva posición (lo cual es difícil en un deporte con equipos de solo cinco jugadores). El llamado "stretch four” no solo pulula debajo de la canasta sino que también participa más allá de la línea de los tres puntos, y esto se debe en gran medida a Nowitzki.

·     Él creó su propio tiro: el "fadeaway jump shot”, volando hacia atrás con la rodilla doblada. Esta manera de arrojar el balón a la canasta ya es legendaria, y junto con el skyhook de Kareem Abdul-Jabbar es practicada diligentemente por las nuevas generaciones de basquetbolistas.

·     Su trato agradable y sencillo (así es él en realidad, pese a haber ganado más de 230 millones de euros) lo convierte en el mejor embajador del deporte alemán que haya habido en Estados Unidos. Su ética laboral y su éxito con los Mavericks inspiraron a toda la ciudad de Dallas, y a millones de fanáticos al baloncesto en todo el mundo, sobre todo en el año del campeonato.

Dirk como ejemplo

A quien mire las apariciones o entrevistas de jóvenes futbolistas en Europa, con sus peinados perfectos, sus declaraciones acartonadas que no dicen nada, habría que decirles: "¡Mejor miren a Dirk!”.

Nowitzki es a veces gruñón, a veces alegre, pero siempre profesional. Unos días su juego es de clase mundial; otros juega como el resto. Pero siempre se esfuerza al máximo. Es auténtico, con su mal gusto al vestir, y por eso es una leyenda. Hoy su nombre ya está junto con el de Michael Jordan, Karl Malone y Kareem Abdul-Jabbar. Es la locura. 30.000 puntos. Simplemente, ¡Dirk!