Egipto, dos días después
13 de febrero de 2011Mientras la policía militar normalizaba el tráfico, los ciudadanos limpiaban los restos de la revuelta, las tiendas de campaña desaparecían y los militares anunciaban la disolución del Parlamento y la redacción de una nueva Constitución, unos 2.000 manifestantes del movimiento opositor egipcio continuaban en la plaza Tahrir, en El Cairo, presionando por el cumplimiento de otras exigencias y el mantenimiento de las promesas ya lanzadas.
Renovar el Parlamento y la Constitución
El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, a quien el ex presidente Mubarak dejó el poder tras dimitir, anunció en un mensaje televisivo la disolución de las dos cámaras del Parlamento y la convocatoria a elecciones. La oposición tendrá ahora seis meses, en lugar de los tres que establece la ley, para prepararse para los comicios.
Las Fuerzas Armadas egipcias señalaron que se constituirá un nuevo consejo para reformar la Constitución, aunque no ofrecieron detalles sobre quién lo nombrará. Los militares dijeron que continuarán supervisando el gobierno hasta la celebración de elecciones en el país.
¿Y la ley de emergencia y los prisioneros políticos?
"No todas las exigencias se han cumplido", dijo a la agencia de noticias dpa el estudiante Mussab Sharur, miembro del movimiento juvenil 6 de abril, que jugó un importante rol en las protestas. "Confiamos en las buenas intenciones de la cúpula militar" pero, en últimas, “el pueblo conoce ahora el juego y puede movilizarse en cualquier momento", agregó Sharur.
Hasta ahora, no se ha mencionado la abolición de la controvertida ley de emergencia, en vigor durante casi 30 años, cuyo levantamiento es una de las principales exigencias de los manifestantes. Éstos también piden que el Ejército allane el camino a la puesta en libertad de los prisioneros políticos.
A las oficinas e instituciones…
En el centro de la plaza, el ex oficial Naguib Abdel-Fatah discute con los últimos manifestantes sobre el sentido de seguir allí. "Hermanos, hemos ganado", clama. No es necesario “poner la victoria en peligro de forma innecesaria”, dice Abdel-Fatah, que estuvo en las protestas desde el comienzo: "Llevad vuestra protesta a vuestras oficinas e instituciones".
Precisamente eso ocurrió en el Banco para el Desarrollo y el Crédito agrícola y otras instituciones financieras estrechamente relacionadas con el Gobierno. Los trabajadores de los bancos estatales protestaron contra la supuesta corrupción y abusos de sus directivos. El Banco Central Egipto ordenó a los bancos de todo el país permanecer cerrados mientras continúe la huelga de sus empleados.
Frente al ministerio de Interior, en El Cairo, cientos de policías protestaron por su parte en demanda de mejores salarios y para desmentir acusaciones por su uso de la violencia contra la población.
Primero la seguridad…
En su primera rueda de prensa tras la dimisión del presidente Hosni Mubarak, el primer ministro egipcio, Ahmed Shafik, consideró el mantenimiento de la seguridad como la tarea más importante del país y señaló que no habrá prisa en ocupar puestos ministeriales vacantes: "no nombraremos a más ministros a menos que no haya una confianza plena en su nominación", dijo Shafik.
Su gobierno quiere restablecer la normalidad en la vida cotidiana, "desde en una taza de té hasta en el tratamiento médico", señaló Shafik, quien indicó como otra prioridad la baja de los precios de los alimentos, pues millones de egipcios sobreviven con subsidios estatales.
Pero el movimiento opositor presionó en los últimos días para que se presente de inmediato un completo calendario de reformas que incluya la destitución de este gabinete, nombrado cuando Mubarak aún estaba en el poder. Las Fuerzas Armadas sólo han retirado de sus funciones al ministro de Información, Anas al Fiki, que se halla bajo arresto domiciliario.
Egipto ya no es Mubarak
Entretanto, las imágenes del ex presidente egipcio, Hosni Mubarak, se retiraban oficialmente de las calles y las oficinas del gobierno de El Cairo. Grandes imágenes de Mubarak fueron retiradas también de la Academia Militar en el barrio de Heliópolis. Además, el Ejército comenzó a retirar oficialmente los eslóganes y murales en los que se leía: "Egipto es Mubarak y Mubarak es Egipto".
Los manifestantes ya habían destruido muchas imágenes durante las protestas y borrado el nombre de la estación de metro “Mubarak”, en El Cairo. Además, algunos piden que se cambie el nombre de la Academia de la Policía Mubarak por Academia de Policía Jaled Said, el joven de 28 años presuntamente fallecido a consecuencia de una golpiza policial, cuyo caso desató el levantamiento popular.
Saqueo y daños en el Museo Egipcio
Por otra parte, ocho piezas del Museo Egipcio de la colección del ancestral rey Tutankamón fueron robadas y 70 objetos dañados durante los recientes disturbios, informó el Consejo Supremo de Antigüedades.
El director de esa dependencia del ministerio de Cultura, Zahi Hawass, aseguró que ya se ha abierto una investigación. Pero activistas demandan que se investigue al propio Hawass, quien durante años ha tenido control sobre los principales tesoros de Egipto "sin tener que rendir cuentas", afirman. Actualmente el Ejército vigila el museo, situado en la plaza de Tahrir (de la Liberación).
Europa: próximos pasos
Este lunes (14.02.2011) la alta representante de Política Exterior y Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, viaja en misión oficial al norte de África en un intento por encauzar la cooperación del bloque comunitario con Túnez y Egipto.
Sin embargo, la visita a Egipto no ha sido confirmada por sus autoridades. Para los críticos de Ashton, ambas visitas llegarían demasiado tarde: "Javier Solana hace tiempo que habría ido (al Magreb)", comentó un alto diplomático durante la cumbre de la UE hace una semana, en alusión al antecesor de Ashton.
Por su parte, la agencia de noticias Reuters reporta que el ministro británico de Comercio, Vince Cable, sugirió la necesidad de una acción internacional para detectar presuntos activos en el extranjero del depuesto presidente egipcio Hosni Mubarak y su familia.
La oficina de Gran Bretaña sobre fraudes financieros graves (SFO), lanzó una búsqueda de activos vinculados a Mubarak y al ex presidente tunecino Zine al-Abidine Ben Ali, reportó el diario Sunday Times sin citar fuentes. Hasta el momento sólo Suiza ha anunciado un congelamiento sobre activos que podrían pertenecer a Mubarak.
Autora: Rosa Muñoz Lima (dpa/reuters)
Editora: Emilia Rojas Sasse