El fuego y la furia arrasan Washington
5 de enero de 2018Originalmente, "Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump" debía salir a la venta el próximo martes en Estados Unidos. Pero su salida al mercado se adelantó para este viernes (05.01.2018) en vista de que todos hablaban ya de este libro, para el cual el periodista Michael Wolff realizó más de 200 entrevistas. Lo más probable es que se venda como pan caliente, porque confirma todos los clichés referidos al presidente estadounidense. En 320 páginas se derrama la mofa sobre Trump, lo que llevó a su portavoz Sarah Sanders a afirmar que el libro era "basura” y una "obra llena de mentiras y rumores”. Los abogados de Trump intentaron evitar a último minuto que entrara en circulación.
Lea también:
"Fuego y furia": el libro que hace temblar a Donald Trump
Trump vs. Bannon: ¿El fin del monstruo de Frankenstein?
Lágrimas amargas en la noche del triunfo
De acuerdo con las investigaciones de Wollf, Trump no quería ganar las elecciones. Su plan era perder honrosamente, de la manera más estrecha posible, para luego retornar a sus negocios con redoblada popularidad. Incluso pensaba en poner en marcha su propio canal de TV. Pero, como se sabe, ese plan no resultó. "Poco después de las 8 P.M. de la noche electoral, cuando la sorpresiva tendencia de la victoria de Trump parecía confirmada, Donald junior le contó a un amigo que su padre lucía como si hubiera visto un fantasma. Melania lloraba, y no de alegría”, se lee en "Fire and Fury”.
Wolff describe a Trump como un hombre con poco interés en estudiar asuntos complejos. Cita a Katie Walsh, antigua subjefa de gabinete, diciendo que obtener de Trump instrucciones sobre planes políticos era tan difícil como descubrir los deseos de un niño. También dijo que Trump no leía y que cuando era candidato no le interesaba, por ejemplo, aprender algo sobre la Constitución estadounidense, de la que no sabía prácticamente nada.
Hamburguesas y mujeres ajenas
El libro señala que Trump pasa las tardes de preferencia en la cama. "Cuando no tenía una cena a las 18:30 con Steve Bannon, se llevaba a la cama una hamburguesa, miraba sus tres televisores y telefoneaba”. En esas conversaciones telefónicas solía quejarse de sus colaboradores.
Apropósito de cama, tal parece que no se toma muy en serio la fidelidad conyugal. "A Trump le gustaba decir que una de las cosas que hace que la vida sea digna de vivirse es acostarse con las mujeres de los amigos”, sostiene el libro. Para que accedieran, intentaba convencerlas de que sus maridos eran infieles.
A diferencia de su gran apetito sexual, en lo que respecta a comidas, Trump es descrito en "Fuego y Furia" como un tanto paranoico. "Durante muchos años tuvo miedo de ser envenenado. Ese es un motivo por el que le gustaba comer en McDonalds; allí nadie sabía que vendría y la comida ya estaba preparada”, escribe Wolff.
Imagen deplorable
El autor revela también el secreto del peinado de Trump, indicando que Ivanka hablaba de una supuesta "cirugía de reducción del cuero cabelludo" del presidente. En términos generales, el jefe de la Casa Blanca es descrito en "Fuego y Furia” como holgazán y ególatra. Tampoco su familia sale bien parada. Bannon –al parece una de las principales fuentes de Wolff- califica a Ivanka de "tonta” en el libro, en el que se dice también que su esposo, Jared Kushner, y Donald Trump junior estaban involucrados en negocios de lavado de dinero.
¿Cuán verídicas son las afirmaciones del libro? En el Washington político, Michael Wolff no está libre de polémica. Ya ha sido acusado más de una vez de exagerar. Por otra parte, no pocos de sus informantes pueden tener interés personal en desacreditar a Trump y su familia. La lista de quienes han sido humillados públicamente por el mandatario es larga.