Alemania al frente de la ECA
11 de septiembre de 2013
La ECA, como se conoce oficialmente a la Asociación de Clubes Europeos por sus siglas en inglés, viene marchando al ritmo alemán desde que empezó a operar como vocera ante la FIFA y la UEFA como representante de los intereses de los más importantes clubes profesionales del viejo continente. Karl Heinz Rummenigge, directivo del Bayern Múnich, ocupa desde el 2008 su presidencia.
Prioridad: los clubes
Lo que empezó a pequeña escala en el año 2008 para defender intereses económicos y deportivos del famoso grupo G14, la unión de los 18 clubes más influyentes del fútbol europeo, entre ellos Bayern, Milán, Inter, Chelsea, Dortmund, Real Madrid, Barcelona, Juventus, Ajax y Manchester United, es hoy una organización continental de gran peso.
En apenas cinco años, con Rummenigge a la cabeza, la ECA ha crecido en número de integrantes (actualmente 214 provenientes de los 53 miembros de la UEFA), y en influencia ante aquellos sectores y organismos con los cuales trabaja conjuntamente.
El principal objetivo de la ECA, y materia principal de las funciones del directivo del Bayern, es hacer prevalecer los intereses de los clubes de fútbol y participar en la toma de decisiones que les afecte, tanto en la FIFA, como en la UEFA y las federaciones nacionales de fútbol.
Así, por ejemplo, la ECA vela por mejores tarifas de pago por la liberación de jugadores de los clubes para que participen con sus países en los partidos de las selecciones nacionales. Por este concepto la asociación ha logrado a la fecha ingresos garantizados por parte de la FIFA y la UEFA superiores a los 170 millones de euro, de los cuales aproximadamente 50 corresponden a los futbolistas que toman parte en las eliminatorias al Mundial del 2014, al igual que aquellos que viajarán a Brasil el próximo año.
Equidad financiera
Los clubes de los cuales Karl Heinz Rummenige es vocero, entre ellos 10 de la Bundesliga, han visto los beneficios de trabajar unidos, bajo el liderazgo alemán, en procura de metas comunes. En el 2012 la ECA consiguió, tras largos meses de negociaciones, uno de sus mayores triunfos.
La asociación llegó a un acuerdo con la UEFA para cubrir con una poliza de seguro las posibles lesiones que sufran sus jugadores mientras están al servicio de las selecciones nacionales. Igualmente logró una participación en las ganancias obtenidas en la Eurocopa: 100 millones de euros en la del 2012, 150 millones en la del 2016.
En materia organizacional el directivo del Bayern también logró cambiar, en nombre de los clubes, los calendarios de juegos internacionales de selecciones eliminando a partir del 2014 las jornadas que no sean dobles, entre ellas la que se disputaba en el mes de agosto y que era una piedra en el zapato para los equipos que se disponen en ese mes a iniciar la temporada en sus ligas locales.
La ECA se ha convertido en poco tiempo en un organismo de poder paralelo a la FIFA y la UEFA que actuando concertadamente y de la mano del funcionario alemán ha logrado moldear el escenario y las reglas del fútbol europeo.