Según la sabiduría popular, irse a dormir antes de medianoche es lo mejor y lo más sano. Pero los científicos descubrieron que las fases de sueño profundo son decisivas para tener un sueño saludable. Éstas fases se producen en las cinco primeras horas después de irnos a dormir, independientemente de si lo hacemos antes o después de medianoche.