¿Embargo pospuesto?
6 de enero de 2012En varias ocasiones ha quedado en evidencia lo mucho que les cuesta a los países miembros de la Unión Europea (UE) sacrificar ciertos intereses nacionales para asumir una política exterior como bloque. Y lo más probable es que esa dificultad vuelva a hacerse patente cuando llegue la hora de poner en vigencia el embargo comunitario sobre las importaciones del petróleo iraní.
En el mejor de los casos, el embargo con el que se pretende ejercer presión sobre el Gobierno de Teherán para que abandone su programa nuclear podrá entrar en vigor dentro de algunos meses. Este viernes (6.1.2012), fueron varios los socios de la UE que pidieron posponer la medida para evitar que sus economías se vieran perjudicadas por la escasez de crudo y el aumento de su precio.
No obstante, el diseño del embargo ya arrancó en Bruselas. Los detalles están siendo discutidos con miras a que sus directrices queden claras a finales de enero. Fuentes diplomáticas informaron que se está sopesando la posibilidad de establecer un “período de gracia” –de uno a doce meses– para garantizar el cumplimiento de los contratos existentes. Grecia está a favor de que dure un año.
Las sanciones y sus repercusiones
Otros países, quizás menos dependientes del petróleo iraní y, en todo caso, económicamente más robustos que Grecia (Alemania, Francia, Holanda y Gran Bretaña, entre ellos), no quieren que el lapso de espera sea mayor de tres meses. Muchos temen que, mientras más dure el forcejeo diplomático con Irán, más larga será la racha de precios altos por los barriles de petróleo.
En el marco de las sanciones contra la industria petrolera persa, se discute la aplicación de sanciones contra el banco central de Irán, encargado de tramitar los negocios petroleros del país. Si se llegaran a congelar sus transacciones con los Estados del bloque comunitario, lo que hasta ahora ha sido descrito como un embargo petrolero terminaría equivaliendo a un embargo comercial.
Para evitar llegar a este extremo se está considerando el bloqueo de procesos de pago muy específicos. Mientras esas conversaciones tenían lugar en el corazón de la UE, Irán anunciaba que llevaría a cabo nuevas maniobras navales en el Estrecho de Ormuz en febrero, la ruta marítima más importante para el comercio mundial del petróleo.
Irán: ¿bravuconada desde una posición cómoda?
Una demostración de fuerza militar que duró diez días finalizó el pasado lunes (2.1.2012). “En este momento, la República Islámica de Irán tiene un dominio absoluto sobre la región y controla todos los movimientos dentro de ella”, dijo el almirante Ali Fadavi, comandante naval del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria iraní, con talante provocador.
Aunque muchos observadores del negocio petrolero dan por sentado que Irán está en capacidad de vender sus 2,6 millones de barriles de petróleo diarios aún bajo la presión de un embargo, el Gobierno del presidente Mahmud Ahmadineyad amenazó con bloquear el Estrecho de Ormuz si una alianza de países occidentales decide aplicar sanciones que puedan perjudicar las exportaciones de petróleo de Teherán.
Autor: Evan Romero-Castillo
Editora: Claudia Herrera Pahl