Enterrados, escondidos, perdidos: diez tesoros y sus historias
El oro de lo Nibelungos, la Cámara de Ámbar o el tesoro de los caballeros templarios: muchos de estos famosos tesoros nunca han sido encontrados. Aquí, las imágenes de los misterios que fascinan hasta hoy.
La Cámara de Ámbar
La Cámara de Ámbar fue creada por un artista alemán. En 1716, el rey prusiano Guillermo l se la regaló al zar ruso Pedro el Grande, y a cambio recibió soldados. En 1941, la fuerza de la Alemania nazi, la "Wehrmacht", robó el valioso ámbar y lo llevó a Königsberg, hoy Kaliningrado, donde se perdió la ultima pista. Aquí en la foto, una copia de la famosa cámara, que puede verse en San Petersburgo.
El tren del oro nazi
El tren del oro nazi es una leyenda acerca de un tren cargado con hasta 300 toneladas de oro, pinturas y otras reliquias, que habrían sido escondidas por los nazis. Los Historiadores señalan que el tren del oro nazi nunca existió, pero eso no detiene a los cazadores de tesoros, que sospechan que está en el oeste de Polonia.
El oro de los Nibelungos
El oro del Rin se mencionó por primera vez en el siglo XIII, en el Cantar de los Nibelungos. En él, Hagen de Tronje arroja el oro al Rin (cerca de "Loche", traducido como "el hoyo", o el pueblo de Lochheim) que Siegfried había conquistado en la batalla contra cientos de guerreros, doce gigantes y un enano. Algunos investigadores creen que el oro no fue hundido en el río, sino enterrado.
Los tesoros de Jerusalén
En el año 70 d.C., los romanos robaron el tesoro del templo: la menorá (un candelero de siete brazos) y la mesa de los panes de la proposición. Ambos artefactos estaban hechos de oro puro. Pero con la caída del Imperio Romano se perdieron. Hay muchas teorías sobre su paradero. Una dice que el tesoro está en el Vaticano. Otra, que el oro fue incorporado a la puerta de la Kaaba, en la Meca.
El oro del zar Nicolás II en el lago Baikal
¿Donde está el tesoro de oro del último zar? ¿Podría estar en las profundidades del lago Baikal? En el invierno boreal de 1920, muchos años después de que el zar Nicolás fuera asesinado, enemigos del orden estatal comunista intentaron rescatar vagones de ferrocarril llenos de oro del lago congelado. La leyenda dice que el hielo se rompió. El tesoro no ha aparecido desde entonces.
El tesoro de los caballeros templarios
En 1307, los ricos Caballeros Templarios se volvieron demasiado poderosos para el rey francés Felipe IV, por lo cual ordenó asesinar a sus líderes. Los hombres de Felipe IV no encontraron tesoros en las casas de la orden, motivo por el que continúa el mito sobre que los caballeros escondieron el tesoro, que, se sospechaba, podría estar en Israel, Escocia y la isla canadiense de Oak.
La espada Honjo-Masamune
El maestro herrero japonés Okazaki Masamune (1264-1343) creó la legendaria catana que habría usado el samurái Honjo Shigenaga. La espada larga japonesa fue un símbolo de estatus durante la dinastía Tokugawa y se traspasó de generación a generación, hasta que fue robada, supuestamente, por el Ejército de EE. UU. luego de la II Guerra Mundial, en 1945, y desde entonces nadie más la vio.
"El pintor en el camino a Tarascón" (1888), de Van Gogh
Este autorretrato de Van Gogh, que muestra al artista con sus utensilios en el sur de Francia, estuvo guardado, junto con cientos de otros cuadros, en la mina de sal de Staßfurt, al sur de Magdeburgo, durante la II Guerra Mundial. Se dice que dos incendios los destruyeron en abril de 1945. ¿O tal vez fueron robados por soldados estadounidenses o nazis? Hasta hoy no hay rastros del cuadro.
Dos cuadernos de apuntes de Charles Darwin
En el año 2000, dos de los cuadernos de Darwin desaparecieron tras una sesión de fotos. El valor: varios millones de libras. ¿Fue un error de la Biblioteca de la Universidad de Cambridge? Esta los buscó arduamente durante 20 años. En 2022 reaparecieron inesperadamente: en un área de acceso público de la biblioteca, en una bolsa de regalo rosa con un saludo de Pascua para la bibliotecaria.
La moneda de oro “Big Maple Leaf”
El 27 de marzo de 2017, la "Big Maple Leaf", una moneda de oro de 100 kilogramos, fue robada de una vitrina en el Museum Bode, de Berlín, y transportada con una carretilla. Fue un robo espectacular. Su valor se estima en 3,75 millones de euros. Se supone que fue fundida para la venta. En 2021 se condenó a varios hombres de clanes mafiosos de la capital alemana por el hurto. La moneda no apareció.