¿Es Grecia reformable? El FMI lo pone en duda
14 de diciembre de 2011Si bien Grecia ya logró algunos avances de cara a la resolución de la crisis, todavía existen muchos riesgos debido a las previsiones negativas de crecimiento, dice el FMI en un comunicado.
El FMI saludó la formación del nuevo gobierno en Grecia, pero al mismo tiempo advirtió que el programa de reformas "entró claramente en una fase difícil". Durante los meses de verano (boreal) la implementación de las reformas fue más lenta. Sobre todo en la lucha contra la evasión impositiva los cambios son muy lentos, agrega.
La falta de capacidad de reforma del aparato del Estado
El FMI, que junto a los países de la eurozona es el mayor donante internacional de Grecia, opina de la misma manera que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que en su informe la semana pasada había criticado duramente al gobierno en Atenas por la falta de capacidad de reforma del aparato del Estado griego.
La OCDE examinó todos los 14 ministerios. En un estudio posterior, la organización dijo que no había una visión sobre las metas de la reforma ni un control de la aplicación. También criticó la falta de comunicación y burocracia dentro de las instituciones.
En tanto, los grandes bancos y aseguradoras reafirmaron el compromiso adoptado en octubre pasado de aceptar una quita del 50 por ciento del valor nominal de los títulos de deuda soberana griega, según informa hoy el diario económico alemán "Handelsblatt".
Quitas, deudas y nuevos bonos
La Federación Mundial Bancaria IIF negocia en Atenas con el gobierno griego de Lucas Papademos los detalles de la operación, trascendió de círculos financieros. Se espera que las partes lleguen a un acuerdo hasta el viernes de esta semana.
El lunes, sin embargo, el ministro de Finanzas de Grecia, Evangelos Venizelos, había aclarado que las negociaciones podrían extenderse hasta enero. Venizelos negocia con el gerente de la IIF, Charles Dallara.
Con la quita del 50 por ciento del valor nominal de los bonos, Grecia vería reducirse la carga de la deuda en unos 100.000 millones de euros de un total de 350.000 millones de euros.
A través de la operación, los tenedores de títulos griegos, en su mayoría bancos y aseguradoras, cambiarían los bonos actuales por otros de menos valor nominal pero con una garantía del Estado de hasta 30.000 millones de euros. La quita tiene por fin disminuir la deuda griega de 160 a 120 por ciento del PIB hasta el año 2020.
dpa
Editor: Pablo Kummetz