Europeísmo bajo prueba
16 de julio de 2004
El diario conservador británico, Daily Telegraph, mezcla en su comentario la propuesta de la Comisión de la UE, de implementar un mecanismo de devolución para los países contribuyentes netos. La iniciativa reduciría paulatinamente el llamado ‘cheque británico’, negociado hace 20 años por Margaret Thatcher. El Reino Unido ha sido el único país beneficiario de una devolución por sus contribuciones netas a las arcas comunitarias.
“Las condiciones bajo las cuales el presidente francés, Jacques Chirac, ha prometido a los franceses un referéndum sobre la Constitución Europea, complica aún más el proceso de ratificación. De fracasar la Constitución, el próximo gobierno británico tendría la oportunidad, tal vez por última vez, de proponer una reforma fundamental de la Unión Europea. Mientras Europa no siga a Gran Bretaña, se condenará a si misma al retroceso económico y a la derrota política. La eliminación del cheque británico es el disparo de salida de una larga batalla que decidirá el destino de nuestro continente”.
No será un paseo dominical
El diario regional francés L’Eclair des Pyrénées, señala: “Considerando la magnitud de lo que está en juego, sería impensable que la Constitución no fuera ratificada por la soberanía del pueblo, por un referéndum. Chirac se ha sumado a esta postura y es bueno que así sea. Pero no se debe dar la impresión que el ratificarla será un simple paseo dominical. Nuevamente nos encontramos ante un río revuelto en el que se mezclan los temas europeos con las preocupaciones nacionales, el futuro de la UE con las ambiciones de políticos franceses.(...) Pese a que la mayoría de los franceses son europeístas, les provoca cierta desconfianza los tecnócratas de Bruselas y es por ello que el referéndum encierra riesgos”.
¡Enhorabuena!
Por su parte el rotativo Volkskrant de Holanda, de orientación socialdemócrata, escribe: “Por primera vez en la historia de la Unión Europea, la mayoría de sus súbditos se pronunciará acerca de un tratado europeo. Pese a todos los inconvenientes que implica un referéndum, la repentina popularidad de este instrumento merece un ¡Enhorabuena! En el contexto europeo, en donde la falta de mecanismos democráticos amenaza la legitimidad de el proyecto europeísta, un referéndum es una de las pocas posibilidades para meter por la puerta trasera el control democrático directo. (...) Un referéndum sobre la Constitución Europea significa jugar con el fuego, dicen quienes se oponen a su realización, y tienen razón. Pero la alternativa existente, seguir según la vieja escuela, significa, a final de cuentas, una fundamental amenaza a la integración europea”.