Evo Morales asume su tercer mandato
22 de enero de 2015"Sí, juro", expresó el mandatario de raíces indígenas ante 36 senadores y 130 diputados de los nueve departamentos de Bolivia. En la toma de posesión, en el viejo edificio del Congreso, participaron los presidentes Nicolás Maduro, de Venezuela; Dilma Rousseff, de Brasil; Horacio Cartes, de Paraguay; Luis Guillermo Solís, de Costa Rica; Rafael Correa, de Ecuador; Anthony Carmona, de Trinidad y Tobago, y el primer ministro de Namibia, Hage Geingob. Además asistieron los vicepresidentes de Argentina, Perú y Cuba, y decenas de enviados especiales e invitados.
La ceremonia de asunción del mando de Evo Morales y su vicepresidente, el matemático Álvaro García Linera, fue seguida por representantes de 36 naciones originarias y de movimientos sociales que respaldan al mandatario, además de militares y policías, que colmaron la Plaza Murillo en La Paz, donde están el Palacio Quemado, el Congreso Nacional y la Catedral de Nuestra Señora de La Paz.
Con un fuerte respaldo popular, el primer mandatario indígena boliviano, de 56 años, ha vencido tres veces en las urnas: la primera, con un 53,74 por ciento en 2005; la segunda, con un 64,22 por ciento en 2009; y la tercera, con un 61,36 por ciento en 2014. Además, salió airoso de un referendo revocatorio de mandato con un 67,43 por ciento en 2008. "Todo se hizo con la unidad del pueblo boliviano, y el acompañamiento de nuestros movimientos sociales", destacó. Por eso, este año, Morales entregó los símbolos presidenciales a cinco representantes de organizaciones obreras, campesinas e indígenas.
En su discurso de 51 minutos, el presidente boliviano destacó los logros macroeconómicos de su gobierno de nueve años, en los que el crecimiento económico sostenido pasó del 4,8 en 2006 al 5,5 por ciento en 2014, con un ingreso per cápita que subió de 1.182 a 2.757 dólares en ese período y un desempleo que cayó del 8,1 al 3,2 por ciento. La inflación osciló en estos nueve años entre el 4,8 y el 5,19 por ciento, las exportaciones subieron de los 3.000 a los 12.062 millones de dólares y las reservas internacionales del Banco Central de Bolivia pasaron de los 1.714 a los 15.551 millones de dólares.
Menos pobreza, más conocimiento… y acceso al mar
En corto tiempo hemos mejorado la situación económica y social pero falta consolidar nuestro proceso de cambio. Tenemos democracia y estabilidad política, eso me sorprende a mí", dijo Morales, quien precisó que durante este tercer mandato constitucional impulsará la construcción de hospitales de segundo, tercer y cuarto nivel, además de una reforma judicial. Morales prometió avanzar con el "socialismo originario" que lo hizo el mandatario más popular de la región, en medio de un desplome en los precios de las materias primas que exporta el país que podría complicar sus planes.
"Ama Sua (no seas ladrón), Ama Llulla (no seas mentiroso) y Ama Quella (no seas flojo), esa es la norma que nos dejaron nuestros antepasados y en base a esas normas vamos a continuar sirviendo al pueblo boliviano en estos cinco años", dijo el presidente, usando palabras en dialecto aymara. "Hasta el 2020 nos comprometemos y estamos convencidos que vamos a reducir la extrema pobreza a un sólo dígito, al ocho o nueve por ciento de extrema pobreza", prometió Morales. Bolivia, según organismos internacionales, tiene aún alrededor de un 15 por ciento de su población en extrema pobreza. El presidente anticipó también la construcción de una ciudadela del conocimiento, la industrialización de los recursos naturales y el combate al narcotráfico.
Durante casi una década en el poder, Morales ha obtenido resultados positivos implementando programas sociales y nacionalizando industrias clave como la petrolera y del gas. Aunque, después de su victoria electoral, Morales ha intentado alejar los temores que tienen los inversores sobre una posible nueva ronda de privatizaciones, sobre todo en los sectores de minería y bancario.
Algunos críticos del Gobierno aseguran que su fuerte gasto social no podrá ser sostenido si no se descubren nuevos yacimientos de gas, en momentos en que la economía de la nación andina –que depende en gran medida de las exportaciones de gas natural- se ve amenazada por la caída de los precios a causa de la menor demanda mundial. En este sentido, el presidente dijo que entre los desafíos que tiene por delante el país también figura avanzar en un cambio del perfil productivo del país.
Adicionalmente, el mandatario justificó la demanda presentada hace dos años ante la Corte Internacional de Justicia contra Chile por una salida al océano Pacífico. "Un día vamos a volver al mar", aseveró.
La jornada festiva se desarrolló con eventos protocolares en el Palacio Quemado para los visitantes extranjeros y la actuación de artistas locales en el estadio de La Paz.
RML (dpa, reuters)