G-20: la Unión Europea por un mayor control
7 de noviembre de 2008Los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE) acordaron hoy, durante su reunión en Bruselas, una línea común para la próxima Cumbre del G-20. En ella se tratará la reestructuración del sistema financiero mundial. Este encuentro, al que asisten los líderes de las veinte economías más fuertes, tendrá lugar el 15 de noviembre en Washington.
"Hemos tenido una discusión muy amplia y puedo decir que hay una postura europea muy determinada", declaró Nicolás Sarkozy, el jefe de Estado francés, cuyas polémicas propuestas para “refundar el capitalismo” alimentaron ardientes discusiones y fueron revisadas durante la reunión.
La UE por mayor control
La UE tiene ahora una visión conjunta para el nuevo orden del sistema financiero internacional, que básicamente consiste en reforzar el control de los mercados financieros, a fin de evitar futuras crisis económicas. Por reforzar las instancias de control, por una gestión más responsable y transparente, por mayor mejor predicción y prevención de crisis y por el fortalecimiento de las principales instituciones internacionales -como el Fondo Monetario Internacional- abogará la UE..
Tras las protestas de algunos Estados miembro del bloque, los líderes europeos suavizaron una de las propuestas clave presentadas por Francia: la de regular todas las instituciones financieras mundiales. "Ninguna institución financiera, segmento del mercado o jurisdicción deberá escapar a una regulación proporcionada o adecuada, o al menos a una supervisión", dice el texto revisado.
También se eliminaron otros puntos de la propuesta francesa. De otra manera, "nos arriesgamos a estar sobrerregulados y a ser demasiado rápidos en nuestra respuesta", dijo el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, argumentando que es preferible aprobar pocas medidas, pero eficaces, a muchas difusas.
Bien preparada para el G-20
Según la canciller alemana, Angela Merkel, la UE va bien preparada a Washington: “Sabemos que tenemos otros socios, pero primero tenemos que lograr un acuerdo entre nosotros. Esa postura común se traduce en mayor transparencia en los mercados financieros, en la necesidad de instituciones más fuertes que puedan actuar globalmente”.
En cuanto al futuro papel del Eurogrupo, Sarkozy afirmó que existe el deseo de que siga desarrollándose, aludiendo a la posible dimensión política que podría adquirir. "Si hay un problema que afecta a todos, los mandatarios deberían poder actuar en conjunto", concluyó el presidente Sarkozy.