Hans Blix: “Unión Europea es un ejemplar proyecto de paz”
26 de octubre de 2004
Violaciones de los Derechos Humanos, enfermedades, hambre, desempleo, catástrofes ecológicas y guerra. Las amenazas a la seguridad del mundo de hoy son múltiples. ¿Se puede acaso “construir” seguridad? Según, Peter Croll, del Centro Internacional de Conversión de material militar en civil, con sede en Bonn, los atentados del 11 de septiembre de 2001, “desplazaron las prioridades en cuestión de seguridad”. Así fue como la consiguiente guerra contra Irak “no redujo sino que aumentó la inseguridad en el mundo”.
La agresión contra otros genera violencia contra sí
Sin desconocer el derrocamiento de la dictadura de Saddam Hussein, es evidente que Irak es hoy un país más inestable que antes, o por lo menos, más inseguro. A cambio de ganarse la voluntad del pueblo iraquí, los desmanes de las tropas han provocado la constitución de una plataforma para actos terroristas inéditos en la región y fuera de ella. Hans Blix opina incluso que “muchos musulmanes asumieron una posición anti-estadounidense y anti-occidental sólo después de ver y ser víctimas personales de la violencia de la Alianza que incursionó en Irak y comprender que las razones para hacerlo fueron basadas en mentiras”.
Cooperación contra el peligro
La presunta posesión de armas de exterminio masivo fue el argumento principal de los Estados Unidos y sus aliados para atacar a Irak. Pero aunque no encontraron tales armas, los temores de que terroristas puedan hacerse a armas nucleares, por ejemplo, sigue dominando: “Si queremos evitarlo, la Comunidad Internacional tiene que contar con la certeza de que ningún país esté sirviendo, o acaso ofreciendo refugio a terroristas”. En ese caso, Blix cree que se pueden establecer claras reglas sobre el castigo que pueden sufrir los paises que fomenten el terrorismo. Un ataque “á la Afganistán” no es descartado por el experto.
Pero antes de que se llegue a usar la fuerza, es mejor evitar que se llegue a situaciones de conflicto. Las misiones de paz de Naciones Unidas, las llamadas “peace keeping”, son por ello, de las más exitósas actividades que haya emprendido la ONU en las últimas décadas. En 2003, Naciones Unidas envió 15 misiones de paz. Las misiones de paz son incomparablemente menos costosas que cualquier guerra. Según expertos, estas misiones organizadas por la UNO cuestan unos 4 mil millones de dólares por año. Esta suma equivale al 1% de los gastos en seguridad de Estados Unidos antes de la guerra contra Irak.
Europa da un magnífico ejemplo de paz
La integración regional de países también puede ser una alternativa pacífica. Hans Blix considera, por eso, a la Unión Europea como “el mayor proyecto de paz de nuestros tiempos”. El compartir las bondades del éxito económico, velar por el respeto de los Derechos Humanos y catalizar las diferencias entre la comunidad de países miembros “construye paz, dentro y fuera de Europa”.