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Humo de cigarrillo y químicos prohibidos contaminan niños en Alemania

José Ospina Valencia28 de agosto de 2007

Los niños en Alemania ingieren e inhalan tóxicos que pueden ser letales. DDT y ablandadores fueron detectados en todos los niños examinados. La mitad es afectada por el humo del tabaco fumado por sus familias.

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Más de 300 sustancias tóxicas contiene la leche materna de mujeres en Alemania.Imagen: picture alliance/dpa

La niñez en Alemania está amenazada por residuos químicos de la lista roja. Un reporte publicado este 28 de agosto de 2007 por la Oficina de Medio Ambiente da cuenta de que “en absolutamente todos los 1.790 niños y niñas examinados se encontraron concentraciones de ablandadores sintéticos de plásticos y DDT”, dijo Andreas Troge, presidente de la Oficina federal de Medio Ambiente. El ministro alemán del ramo Sigmar Gabriel, se mostró incluso sorprendido de que los niños de familias pobres resultaran ser más afectados que aquellos de hogares mejor situados.

DDT: prohibido en el mundo, presente en niños alemanes

Según Greenpeace, el DDT (dicloro difenil tricloroetano) es un pesticida organoclorado, que comenzó a utilizarse de forma extensa durante la II Guerra Mundial para controlar enfermedades que se transmitían a través de insectos denominados "vectores". De ahí que se diga a menudo que el DDT se utiliza para el "control de vectores". Se sintetizó por primera vez en 1874, pero hasta 1939 Müller y sus colaboradores no descubrieron sus propiedades insecticidas, que les valió el Premio Nobel en 1948.

Durante décadas, el DDT tuvo un uso agrícola y forestal, pero debido a su impacto medioambiental se prohibió casi universalmente. Desde entonces numerosos investigadores han documentado los riesgos de los compuestos organoclorados bioacumulativos para los seres humanos y para la vida silvestre en general.

Niños amamantados con leche contaminada

El mencionado estudio contenido dentro del Reporte anual sobre la situación del Medio Ambiente en Alemania, se realizó entre 2003 y 2006 y se basó en pruebas de orina y sangre de los niños entre los 3 y 14 años de edad, así como en el análisis del entorno en que vivían. Los resultados son catalogados por los científicos como “representativos” para Alemania.

DDT, el químico que otrora se vendiera como la panacea contra la malaria, y otras sustancias como PCB o HCB fueron encontradas en las grasas de humanos, a pesar de haber sido prohibidas hace más de 30 años. “Los niños que fueron amamantados presentaron una contaminación mayor que aquellos que no lo fueron”, especifica Troge que, aún así resalta las ventajas de amamantar a los bebés.

Habitaciones húmedas y mal aireadas favorecen moho

Aún más sorprendidos se mostraron los investigadores al descubrir que la intoxicación de niños con moho es cada vez mayor. El 8% de los niños presentaron reacciones alérgicas a hongos surgidos de la humedad en recintos cerrados. Este tipo de moho es causante de alergias y diferentes grados de asma.

La difusión de hongos contaminantes se debe a la proliferación de construcciones de cuartos con pésimas condiciones de aire, debido en parte, al extremado pero nocivo aislamiento de paredes. Un hecho que pone en duda el sentido de algunas de las medidas políticas en pro del ahorro del gasto de energía en hogares, ya que la recomendación generalizada del ministerio del Medio Ambiente es que las construcciones necesitan más aislamiento.

Mal moderno: sordera infantil por exceso de ruidos

Además de los químicos, el ruido es otro contaminador del entorno que, entre tanto le ha provocado daños del oído al 14% de los jóvenes. El 3% de ellos ha perdido incluso parte de la capacidad auditiva.

Mitad de los niños expuestos al tabaco fumado por padres

Pero los riesgos para la niñez en Alemania no son solo involuntarios. Uno de los factores más nocivos es el humo del cigarrillo expelido por los mismos padres de los pequeños. La mitad de los hijos de padres alemanes son condenados a ser fumadores pasivos, dice el reporte del ministerio del Medio Ambiente. Las consecuencias de la inhalación de las sustancias tóxicas del cigarrillo en niños son vergonzantes: debilitamiento general del sistema inmunológico que degenera en continuas infecciones y puede terminar en cáncer.

Pero mientras los niños de familias no educadas y de bajos recursos son más expuestos al humo del cigarrillo, los hijos de los ricos presentan mayores concentraciones de fosfatos orgánicos, un herbicida encontrado en jugos de frutas.