Inmigración: el tema más candente en la UE
12 de noviembre de 2005
Así lo dijo Franco Frattini, vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Justicia, Libertad y Seguridad, en declaraciones a la prensa europea.
Lo más urgente para la UE es actualmente tomar medidas a corto plazo para proteger sus fronteras externas y acordar estándares mínimos para procedimientos de expulsión y retorno de inmigrantes ilegales a sus países, dijo Frattini.
Actualmente, la UE negocia en ese sentido con Marruecos, Rusia, Ucrania, Argelia, Turquía, China y Albania. El objetivo es que esos países acepten rápidamente el retorno de inmigrantes procedentes de allí. El precio para ello es alto: los países aspiran a obtener concesiones en otras áreas.
"Ningún programa de integración funciona realmente"
Pero Frattini concede que esas medidas sólo elevan las barreras para la inmigración nueva. "De los que ya están, nos tenemos que ocupar de otra forma", resalta. Para ello existen numerosos programas, pero ninguna de ellos funciona realmente. El ejemplo de Francia es uno de los más flagrantes.
Frattini destaca que el "problema global no puede ser dejado en manos de los ministros de Interior". Y explicita: "El Estado tiene la obligación de perseguir a quienes delinquen, pero la integración es tarea de todas las áreas de la política. Y allí hay todavía mucho por hacer".
Uno de los puntos más candentes es que Europa no sabe cómo distinguir entre la inmigración que desea de la que no desea. En la UE viven actualmente cinco millones de trabajadores inmigrantes, urgentemente necesitados en numerosas ramas económicas, ya que hasta el 2020 el número de trabajadores en la UE disminuirá en seis millones. La razón: la disminución en la tasa de natalidad.
Ramas económicas enteras necesitan inmigrantes
Desde hace tiempo, ramas económicas enteras no podrían sobrevivir sin los inmigrantes. En el orden del día de los ministros se hallan a estudio soluciones como la "green card" norteamericana.
Otro plan posible es la extensión de una autorización de trabajo, luego de no haberse encontrado ningún ciudadano nacional o de un país de la UE para un determinado puesto de trabajo.
Austria llevó en el pasado esa idea a la práctica, pero desembocó en una desbordante burocracia, por lo que es dudoso que se ponga nuevamente en práctica.
Integración y control de la inmigración nueva
Por un lado inmigración e integración ordenadas; por otro, un control más estricto de la inmigración ilegal. Tal parece ser el mix en que piensa la UE.
Una de las mayores puertas de entrada de la inmigración ilegal en Europa es el Mediterráneo. Y los peligrosos viajes en barcos organizados por las redes de tráfico de personas a través del Mediterráneo desde Marruecos a España y desde Túnez a Italia son uno de los principales modos de entrada en Europa de los inmigrantes clandestinos.
Miles mueren en el intento, según las organizaciones no gubernamentales. Por ello, la UE planea crear una nueva fuerza policial marítima conjunta, dijo Frattini.
¿Guardia Mediterránea para el 2006?
"A José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente del Gobierno español, le he adelantado (...) que para la primavera de 2006 estaríamos en condiciones de pensar en una guardia mediterránea, una fuerza en la que participen distintos países europeos con sus naves y tecnología y sus oficiales de policía y funcionarios de frontera", dijo Frattini hoy en declaraciones al diario El Mundo, de Madrid.
"Lo principal es evitar el tráfico de humanos", añadió. El comisario dijo que la fuerza conjunta sería más efectiva que la actual coordinación policial bilateral, como las operaciones conjuntas desempeñadas por las policías de España y
Marruecos.
Italia, el país natal de Frattini, ha visto un incremento del 50 por ciento en el número de inmigrantes africanos que llegan a sus costas por barco, según el gobierno. En España, Salvamento Marítimo ha rescatado a 5.700 inmigrantes en el mar este año y en el primer semestre la policía ha detenido a más de 40 personas por contribuir a la inmigración ilegal.
España e Italia son los puntos de acceso a Europa más fáciles para los inmigrantes, en particular a través de las islas situadas frente a la costa africana: las Canarias y Lampedusa, que atraen a miles de inmigrantes de toda África que esperan llegar después al continente europeo.