Más allá de la amenaza

Este jueves (29.12.2011), China hizo un llamado para que tanto la Unión Europea y Estados Unidos como Irán hagan todo lo posible para mantener la paz, luego de que el Gobierno de Teherán amenazara con bloquear el Estrecho de Ormuz. Esa advertencia es la respuesta al anuncio de que Bruselas y Washington sopesan nuevas sanciones para presionar a los iraníes a abandonar su programa nuclear. Por el Estrecho de Ormuz es transportado un quinto de la producción petrolera consumida en el mundo.

Londres desestima amenaza iraní

Aunque el bloqueo de esa ruta marítima podría golpear la economía de Gran Bretaña con aún más fuerza que la crisis de la zona euro, el ministerio de Exteriores británico insiste en restarle seriedad a las amenazas de Irán, alegando que no pasa de ser una cortina de humo. “Los políticos iraníes emplean este tipo de retórica con frecuencia para desviar la atención de lo verdaderamente importante: su programa nuclear”, sostuvo un vocero del ministerio en Londres este 29 de diciembre.

“Nosotros queremos poner fin a este enfrentamiento mediante la negociación. Por eso practicaremos la estrategia de ejercer presión, por un lado, y mostrar disposición al diálogo, por el otro, hasta que Irán convenza a la comunidad internacional de que su programa nuclear no tiene carácter militar”, agregó el portavoz del ministerio británico de Exteriores. La reacción de Gran Bretaña a la amenaza iraní contrasta mucho con la de Estados Unidos, que ha respondido con menos estoicismo.

Washington mira más allá de un posible bloqueo

“La perturbación del tráfico marítimo en el Golfo Pérsico no será tolerada”, dijo Amy Derrick Frost, vocera de la quinta flota estadounidense, una de las naves de guerra actualmente estacionadas en la región. Su comunicado es un eco de los emitidos por el Ministerio de Defensa de Estados Unidos y la Secretaría de Estado. Todo apunta a que la preocupación no gira en torno al bloque del Estrecho de Ormuz por sí mismo; el embajador de Estados Unidos ante la ONU asegura que la marina estadounidense puede reabrir esa ruta marítima en tres días.

De hecho, el Ministerio estadounidense de Defensa observa las actuales maniobras de la marina iraní frente a sus costas sin preocupación. Es la posible intensificación del conflicto entre Irán y Estados Unidos lo que parece inquietar a Washington. En el editorial más reciente del diario alemán Süddeutsche Zeitung se prevé que, si se llega a un enfrentamiento armado en el Golfo Pérsico, las posibilidades de que las tensiones generen un conflicto regional que involucre a las monarquías petroleras árabes serían grandes.

Autor: Evan Romero-Castillo
Editor: José Ospina-Valencia