Israel bombardea ochenta objetivos en Gaza

Militantes palestinos dispararon, desde el viernes, una treintena de cohetes hacia Israel, luego de que soldados israelíes mataran a cuatro palestinos en protestas violentas en la frontera. Israel responsabilizó de los ataques con cohetes al movimiento islamista Hamás, que controla de facto Gaza, aunque fue el movimiento islamista Yihad Islámica quien reclamó más tarde la autoría de los lanzamientos.

"En respuesta a sus graves acciones, docenas de aviones de combate, helicópteros y aeronaves del Ejército realizaron un ataque nocturno a gran escala contra aproximadamente ochenta objetivos" de ese grupo (Hamás) en la franja de Gaza, comunicó una nota militar israelí.

Así, el conflicto entre ambas partes ha vuelto a escalar peligrosamente, aunque no se habían reportado por ahora víctimas mortales de los cohetes palestinos o los bombardeos israelíes y el movimiento islamista Yihad Islámica ya anunció este sábado en Gaza que ponía fin al lanzamiento de cohetes hacia Israel.

Respuesta del Ejército israelí

Entre los objetivos atacados por Israel se cuenta un edificio de cuatro pisos, que el Ejército asegura que "servía como la nueva sede de los Servicios de Seguridad de Hamás en el barrio de Daraj", en Gaza capital. La nota militar israelí afirma que el inmueble era propiedad de Hamás y que antes de comenzar el ataque, "las tropas pidieron varias veces a los residentes del edificio que lo abandonaran".

También fueron bombardeadas, según el Ejército israelí, "dos instalaciones avanzadas de fabricación de armas", "cinco complejos militares", "una base de entrenamiento en Rafah, un puesto de observación antiaéreo en Beit Lahia" y "la entrada a un túnel ofensivo" en la localidad de Jan Yunis.

Israel identificó el lanzamiento de los alrededor de treinta proyectiles desde Gaza, que comenzó sobre las diez de la noche, hora local del viernes (26.10.2018). Según el Ejército israelí, el sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro (Iron Dome) interceptó una decena de estos misiles, dos cayeron dentro del enclave costero y el resto en espacios abiertos en Israel.

En las comunidades israelíes colindantes, las sirenas antiaéreas sonaron en varias ocasiones a lo largo de la noche, haciendo a miles de civiles correr a los refugios, especialmente en la localidad de Sderot y el Consejo Regional de Shaar HaNeguev. 

Los equipos paramédicos del servicio de emergencias Maguen David Adom (Estrella Roja de David, MDA) trataron a siete personas por ataques de ansiedad, y dos personas resultaron heridas mientras corrían a los refugios, informó un portavoz.

Israel considera que el ataque se realiza "en una atmósfera llena de terror, que es provocada por Hamás en el área de la valla de seguridad y en actos como los eventos de esta noche".

Protestas y disposición a la guerra (o a la paz) en Gaza

En Gaza, las Brigadas Al Quds (brazo armado de la Yihad Islámica) enviaron un comunicado en el que aseguraban "estar preparadas para cualquier batalla con el enemigo sionista" y amenazaban con llenar Israel de "cohetes santos", en una posible asunción de responsabilidad por el lanzamiento de cohetes.

El portavoz de Yihad Islámica, Dawood Shihab, declaró en un comunicado que su grupo mantiene contactos con Egipto, cuyos servicios de Inteligencia median para lograr un alto el fuego de larga duración, y agregó que la organización islamista está "comprometida con la calma, siempre que la ocupación israelí esté comprometida con ella".

Alas de varias facciones palestinas, incluido Hamás, habían manifestado este viernes su disposición para la guerra, en una declaración conjunta. Este sábado en la mañana, militantes palestinos dispararon nuevamente un cohete contra Israel. Como diez de los misiles disparados anteriormente, el sistema de defensa Cúpula de Hierro interceptó el misil, aseguró el Ejército israelí.

Más avanzada la jornada, un nuevo comunicado de la Yihad Islámica aseguró que el movimiento acepta restaurar la calma en la Franja de Gaza, como respuesta a los esfuerzos egipcios para lograr una tregua y parar un deterioro de la situación entre Irael y las milicias. El anuncio tuvo lugar tras catorce horas de tensión en torno a la Franja y ante el temor de que la violencia derive en una nueva guerra, que seguiría a las de 2008-2009, 2012 y 2014.

El viernes, alrededor de 16.000 palestinos se reunieron en varios puntos a lo largo de la frontera de Gaza, según información militar israelí. Algunos de ellos habrían lanzado explosivos y piedras a los soldados israelíes. La fuerza aérea de Israel, por su parte, habría atacado tres puestos de Hamás en el norte de la Franja de Gaza durante las protestas.

Desde finales de marzo, más de 200 palestinos han muerto en protestas parcialmente violentas en la frontera de Gaza. Los manifestantes piden que se levante el bloqueo de Gaza, que lleva más de una década en pie, así como el regreso de los refugiados palestinos a las áreas que hoy pertenecen a Israel.

La Franja de Gaza es el hogar de más de dos millones de personas. Sus habitantes sufren la escasez de agua potable y electricidad, entre otras carencias. El gobernante movimiento Hamás está clasificado por EE. UU., la UE e Israel como una organización terrorista. 

rml (efe, ap, dpa)

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