Kiev exige a los separatistas prorrusos que se rindan

El ministro de Defensa ucraniano, Valeri Geletei, exigió a los separatistas prorrusos del este de Ucrania que se rindan, mientras estos conquistaron una nueva ciudad. No habrá alto el fuego o conversaciones hasta que todos los "terroristas" dejen las armas", dijo el ministro, citado hoy (07.07.2014) por medios de prensa ucranianos. El presidente, Petro Poroshenko, había señalado anteriormente su intención de liberar mediante un bloqueo las disputadas regiones de Donetsk y Lugangsk, ahora en manos de los insurgentes. Además, el jefe de Estado cambió sorprendentemente al director de la controvertida "operación antiterrorista", que ahora encabeza Vassili Grizak.

El alcalde de Donetsk, Alexander Luianchenko, aseguró que Poroshenko le prometió que no bombardearía Donetsk. "El Ejército liberó otros lugares con ataques aéreos y artillería, pero en nuestra densamente poblada ciudad, ello provocaría una catástrofe", señaló. Donetsk es la quinta ciudad más grande de Ucrania y cuenta con un moderno centro. En 2012 fue una de las sedes de la Eurocopa de fútbol. Fuera de esos dos feudos separatistas, la situación sigue siendo tensa también en otros puntos del este del país. Después de que el Ejército celebrara sus éxitos, por primera vez los insurgentes conquistaron un lugar en la región en crisis. Unos 100 combatientes tomaron el municipio de Popasnaya durante la noche, informaron medios locales.

Lavrov critica las exigencias de Kiev

Tras conocer las exigencias de Kiev a los separatistas, el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, acusó a la cúpula de Kiev de romper su palabra. Además señaló que en las conversaciones nunca se habló de exigir la rendición de los separatistas prorrusos, como hizo hoy el Gobierno ucraniano. El único camino para solucionar la crisis es un alto el fuego y un encuentro de las partes en conflicto, dijo durante una visita a Liubliana.

Lavrov criticó también las amenazas de sanciones por parte de Occidente contra Rusia. "Las sanciones no pondrán fin al derramamiento de sangre", señaló. Mientras tanto, las autoridades de Kiev acusaron a los separatistas prorrusos de tener una actitud de rechazo total y aseguraron que no reaccionaron a las ofertas de diálogo en los días pasados, dijo el viceministro de Exteriores ucraniano, Daniil Lubkovski. El siguiente paso debe venir ahora de los grupos prorrusos. Sin embargo el líder separatista Valeri Bolotov acusó al Gobierno de chantaje.

Prosigue el conflicto del gas

Por otro lado, continúa el conflicto por el suministro y pago del gas importado por Ucrania. Rusia sumó hoy 838 millones de dólares (unos 616 millones de euros) a la deuda que exige a Ucrania en pago a los suministros, en concepto de los envíos realizados entre el 1 y el 16 de junio, según informaciones de la empresa de gas estatal rusa Gazprom en Moscú. Las deudas totales que Gazprom le reclama a Kiev ascienden por ello a unos 5.300 millones de dólares (unos 3.900 millones de euros), dijo el presidente de Gazprom, Alexei Miller. "Otra vez Ucrania no ha pagado. Eso demuestra que fue correcto cortarles el gas", señaló.

Rusia cerró el grifo de los suministros al país vecino el pasado 16 de junio y quiere volver a negociar solo cuando Ucrania salde su deuda. La cúpula de Kiev exige a Moscú un precio del gas más bajo y descuentos. Los expertos consideran que no habrá acuerdo hasta que no se solucionen otros temas de disputa entre los dos países, como el conflicto con los separatistas fieles a Moscú en el este de la exrepública soviética.

Las ayudas de la Unión Europea, condicionadas

Mientras tanto, la Unión Europea (UE) condicionó hoy posibles nuevas ayudas a Ucrania a que el país impulse su reforma política. Animamos al Gobierno a dar más pasos para una reforma constitucional, hacia la descentralización y hacia una reforma del sistema de Justicia", dijo el comisario europeo de Ampliación, Stefan Füle, desde Bruselas, Además, llamó al Gobierno a luchar contra la corrupción y proteger los derechos de las minorías de habla rusa. El vicejefe de Gobierno ucarniano, Vladimir Goisman, pidió también ayuda en Bruselas para asegurar las fronteras y prometió esfuerzos para combatir la corrupción.

La UE ya aprobó ayudas por 11.100 millones de euros en los próximos siete años, que se unirían a 3.000 más que fluirían directamente al país para ayudar, entre otras cosas, a la reforma de la policía y el sistema judicial. El comisario de Energía de la UE, Günther Oettinger, quiere además volver a mediar entre Moscú y Kiev sobre el conflicto por el gas, según trascendió hoy en Bruselas. Oettinger acordó una reunión con el ministro de Energía ruso, Alexander Novak, pero aún no se fijó la fecha para la misma.

MS (dpa/Reuters)