La odisea del "Aquarius" a través de Twitter
12 de junio de 2018Un barco y 629 vidas en juego han puesto sobre la mesa la ineludible realidad de que la crisis migratoria sigue vigente en Europa, y que todavía no ha encontrado soluciones para el desafío humanitario en que se han convertido las aguas del mar Mediterráneo.
En el centro de la polémica se encuentra el buque "Aquarius”, gestionado por las ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Méditerranée. El barco se encontraba hace unas horas a la deriva con más de seis centenares de migrantes y refugiados rescatados por las organizaciones civiles. El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, quien forma parte de una coalición entre formaciones populistas y derechistas, impidió que arribase a puertos italianos. Tampoco Malta dejó que pisaran tierra en su isla.
La sorpresa vino de otra capital mediterránea: Madrid. El recién estrenado presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció que ofrecía el puerto de la ciudad levantina de Valencia para recibir a esas 629 cuyas vidas siguen en riesgo mientras estén en el mar. Un gesto que supone un viraje radical respecto al Ejecutivo anterior, que más bien se parapetó tras las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla y se alineó con los países de Europa del Este en lo relativo a la reforma del sistema europeo de asilo.
Las redes sociales han servido para amplificar la resonancia del incidente. Dos periodistas españolas a bordo de la embarcación, Sara Alonso, de Radio Nacional de España (RNE), y Naiara Galarraga, de El País, están narrando el desarrollo de los acontecimientos en directo a través de Twitter. Además, han acercado al público hispanohablante a los momentos de mayor tensión que se están viviendo en el barco, así como a los más emotivos.
Así, las redes sociales están sirviendo para que los usuarios sigan en directo la suerte de estas más de 600 personas que buscan en Europa un futuro mejor y que a menudo suelen venir de situaciones de conflictos, persecución o miseria.
España entra de lleno en el debate migratorio
Al contrario que en otros países europeos, como Alemania o Italia, donde la crisis migratoria está a menudo en el centro del debate público, en la política española se trata de una cuestión secundaria. Ni siquiera la polémica gestión de la frontera terrestre con Marruecos suscita un gran debate en el país.
No obstante, la respuesta de Sánchez ha sido aplaudida por numerosos y muy diversos sectores.
Como también sucede en Italia, donde alcaldes de ciudades como Palermo o Nápoles desafiaron la visión de la política migratoria de su Gobierno estatal, muchas ciudades españolas llevan años abogando por un tratamiento distinto a migrantes y refugiados. También en esta ocasión ha sido así. Las alcaldesas de Madrid y Barcelona, Manuela Carmena y Ada Colau, respectivamente, se apresuraron a aportar su granito de arena. Asimismo, Gobiernos regionales como el del País Vasco se han ofrecido a acoger a un determinado porcentaje de las personas rescatadas.
Personalidades y ciudadanos de diversas ideologías han ovacionado también la respuesta de España, que contrasta con las actitudes de muchos otros gobiernos europeos en la actualidad. Algunos, como el conocido periodista Jordi Évole, desearon que se trate de algo más que un gesto y pase a definir la imagen internacional del país tras la moción de censura por la que fue destituido Mariano Rajoy.
No han faltado, sin embargo, las críticas a la decisión del presidente Sánchez, algunas desde puntos de vista constructivos, otras desde actitudes cercanas a la xenofobia.
En cualquier caso, de acuerdo con las últimas informaciones, estas 629 personas, entre las que hay menores de edad y mujeres embarazadas, comenzarán su viaje hacia la Península Ibérica este mismo martes (12.06.2018). "Nos gusta España porque nos acepta”, dijo una mujer nigeriana al conocer la noticia de su nuevo destino.
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos en Facebook | Twitter | YouTube |