Las atribuciones del Parlamento Europeo

Hace mucho que el parlamento europeo dejó de ser el centro de tertulias, donde se hablaba de todo y de nada, sin atribuciones prácticamente sobre nada. En Alemania sigue prevaleciendo la impresión, entre muchos, de que el parlamento europeo no tiene poder ni capacidad de decisión. Quien siga creyendo esto se quedó rezagado diez años. Los parlamentarios europeos tienen cada vez más influencia sobre las políticas nacionales. Tan sólo en materia medioambiental y de protección al consumidor, la casa de representantes con sede en Estrasburgo decide el 80% de las leyes nacionales.

Fútbol, un derecho del pueblo

Durante los últimos cinco años el parlamento europeo despachó 400 propuestas de ley de este tipo. El ciudadano de a pie tal vez no lo sepa, o tal vez sea una falta de información por parte de las instituciones; lo cierto es que mucho de lo que afecta al ciudadano europeo en su vida cotidiana es decidido en Estrasburgo. Ejemplos hay muchos. A dicha cámara fue a parar la discusión sobre la transmisión de los partidos de fútbol a través de la televisión de paga y se dió marcha atrás en favor de los aficionados. El fútbol es un derecho del pueblo y debe poder verse de manera gratuita.

También tuvo que dirimir en la polémica sobre si deben ser o no los mismos fabricantes de automóviles quienes se responsabilicen del deshecho de viejos vehículos. Sí, el fabricante es responsable. El parlamento intervino también en la discusión derivada tras la epidemia de las vacas locas; los parlamentarios decidieron el tipo de pienso que debía darse al ganado bovino en los países miembros, para que la carne de res no se convierta en veneno para el ser humano.

¿Un pueblo, un parlamento?

La elección de los futuros 732 parlamentarios, provenientes de 25 países miembros, tendrá sin duda una influencia sobre la vida cotidiana de la población de dichos países, un total de 455 millones de habitantes. El Parlamento Europeo decide junto con el Consejo de Ministros de la Unión Europea, sobre una serie de cuestiones como política vial, social y de desarrollo, mercado interno, protección al consumidor y al medioambiente. También tiene influencia sobre las políticas de investigación, educación y cultura. En el futuro el parlamento europeo irá ganando más peso a medida que los países miembros, como es deseable, vayan homogenizando sus políticas nacionales. Precisamente que tenga tanta influencia en una serie de temas es el argumento más poderoso para movilizar a los votantes. Sin embargo persiste el miedo. ¿Y si nadie va a votar?