Culpas de Alemania

Les Dernières Nouvelles d'Alsace, de Estrasburgo, Alsacia, en la frontera con Alemania: “(La ministra de Economía francesa) Christine Lagarde demanda a Alemania elevar su consumo interno, por el bien común, en lugar de apostarlo todo a la exportación. Pero esto es tan inapropiado como la diatriba de Angela Merkel ayer frente al Bundestag. La canciller insiste en las virtudes económicas ‘clásicas’. Deja a Grecia a su cuenta y riesgo, la amenaza incluso con retirarle el euro (del que los alemanes dependen hoy tanto como antes del marco) y los tacha de ‘rezagados’ (…). Estas declaraciones han colmado las copas en París y Berlín. La polémica germano-francesa parece atizar muy sutilmente el egoísmo nacional de los 27 Estados miembros (de la UE)”.

La culpa la tiene… ¿el totí?

La Voix du Nord, del Paso Norte de Calais, Francia: “Christine Lagarde añadió ayer leña al fuego, recomendando esta vez una bajada de impuestos en Alemania – con el objetivo de reactivar el consumo interno. Tampoco en este punto existe ninguna oportunidad de que (Lagarde) sea escuchada. Y es que la elección de Alemania entre una reducción del déficit público (…) y una recuperación del consumo ya ha tenido lugar. Sobre todo en un momento en el que Angela Merkel denuncia la laxitud de Grecia e incluso demanda la imposición de sanciones a aquellos países que no cumplan con las ‘reglas de juego’ de la zona euro. La ‘abeja reina’ no quiere pagar por los ‘zánganos’ del Mediterráneo que la rodean”.

“Convergencia europea” vs. competencia global

Neue Zürcher Zeitung, de Zurich: “Para Francia, el tema es que Alemania, que en los últimos diez años ha obtenido considerables aumentos en la productividad, reparta las ganancias de otro modo. Más “convergencia europea” es la exigencia. La pregunta: ¿en qué dirección? Mientras en países como Francia, España y Grecia los costos del trabajo en los pasados 15 años subieron en un 35, 45 y 65 por ciento respectivamente, ese índice equivale en Alemania a sólo un 5 por ciento. Entretanto, quien se la toma con Alemania por su éxito de mercado en la exportación, razona erradamente por partida triple. Una quinta parte del exceso de exportaciones de este 'peso pesado' de la UE se dirige a Estados europeos. (Alemania) no está sólo en competencia con la UE sino con el mundo, entre otros con el ambicioso ámbito asiático. En una competencia crecientemente global, causa además una impresión bastante singular que la UE deba orientarse, no hacia el ejemplo de los exitosos, sino hacia el retraso del resto”.

Merkel pide lo imposible

De Volkskrant, de Amsterdam: La exigencia de (la canciller alemana Angela) Merkel de endurecer las condiciones del pacto de estabilidad (de la UE) refuerza lo que ya había recomendado su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble. La idea es poco realista. El Tratado de Lisboa tendría que ser cambiado para su realización. Para ello sería necesario el consenso de todos los Estados; también de un país que podría sentirse amenazado con verse fuera de la zona euro. Merkel relacionó con la crisis griega su mensaje de las últimas semanas a la opinión pública alemana: apoyo sí, pero ninguna ayuda financiera. Para muchos alemanes es impensable que un país, como mayor economía de Europa, deba pagar por otros que se metieron en problemas ellos mismos”.

RML/AFP/dpa

Editor: Enrique López Magallón