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Las "disonancias" políticas: ahora también en el Internet

Sebastián Sunderhaus24 de agosto de 2005

Comprar música en el Internet ya se ha convertido en algo cotidiano. Pero también hay canciones que son tan horribles que uno se niega a pagar. Los fracasos de famosos que tratan de cantar se pueden escuchar en la red.

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John Ashcroft, ex-ministro de Justicia de los Estados Unidos (2001) le gusta cantarImagen: AP


Páginas como Miserable Melodies (melodías miserables) documentan el proceso de estrellas que se estrellan. John Ashcroft, ex ministro de justicia de los Estados Unidos, trató de cantar la canción "Let The Mighty Tagle Soar". Telly Savalas, el famoso actor del policía calvo "Kojak", quiso hacer feliz a sus contemporáneos con la tonada de "If".

Estrellas que se estrellan

Julio Iglesias se estaba preparando para la presentación de un playback de "Rythm Divine". Lo que no sabía es que el técnico le dió un micrófono en funcionamiento. El resultado de su talento poco convincente se puede escuchar en www.miserablemelodies.com.

Rudolph Moshammer gestorben
Imagen: AP

Rudolph Moshammer, el "zar" de la moda alemana que murió hace poco, cantó en las eliminatorias nacionales para el Festival de la Canción de Eurovisión en 2001. Su pieza de música: "Compartan alegrías y penas". El talento musical del diseñador excéntrico se corresponde sólo con la última parte del título de la canción.

Silvio Berlusconi escribe canciones de amor

EU Gipfel Verfassung Berlusconi in Brüssel
Imagen: AP

Pero también hay políticos que saben cantar bien: Silvio Berlusconi, el primer ministro de Italia, trabajó como animador en un crucero. Hoy en día Berlusconi escribe canciones de amor. Son presentadas por un amigo del jefe de gobierno.

Bundespräsident Walter Scheel BildgalerieBundespräsidenten
Imagen: dpa

Y Walter Scheel, ex presidente de Alemania, grabó en 1974 la canción popular "Hoch auf dem gelben Wagen". En 2004 recibió el disco de oro por haber vendido 500.000 discos en las décadas pasadas.

"Una vez, durante una visita de Estado en África, la canción fue presentada como supuesto himno nacional. Walter Scheel lo aceptó con una sonrisa en los labios", cuenta su productor.