Los demócratas plantan cara a Donald Trump
14 de julio de 2015Durante la Conferencia Anual del Consejo Nacional de La Raza, celebrada en Kansas City, los aspirantes a la candidatura presidencial demócrata en las elecciones de 2016 Hillary Clinton, Martin O'Malley y Bernie Sanders se comprometieron con los inmigrantes y a favor de una reforma migratoria. La exsecretaria de Estado, Hillary Clinton prometió "luchar cada día por una reforma migratoria integral con un camino a la ciudadanía" para los más de 11 millones de inmigrantes indocumentados que se calcula hay en el país.
Por su parte, el senador por Vermont, Bernie Sanders, prometió ante la audiencia reunida por el Consejo Nacional de La Raza, una de las asociaciones latinas más importantes del país, trabajar por "una economía que funcione para todos" y por una reforma migratoria que defienda los derechos de los inmigrantes. Durante su turno de palabra, el exgobernador de Maryland, Martin O'Malley, volvió a hacer gala de sus méritos al frente de la Gobernación de Maryland, donde llegó a aprobar el conocido Dream Act, que regulariza a jóvenes indocumentados, y del que está haciendo un seña de identidad para su campaña.
El exgobernador y también exalcalde de Baltimore, que anunció que este martes (14.07.2015) detallará su agenda en materia de política migratoria, insistió en que bajo su mandato Maryland "luchó por hacer realidad el sueño americano cada día", a través de políticas inclusivas a nivel económico y social. "En Maryland no esperamos a que actuara el Gobierno federal, luchamos por nuestro propio Dream Act y nos aseguramos de que más de 36.000 soñadores (jóvenes indocumentados que llegaron de niños con sus padres) tuvieran acceso a una educación superior asequible", añadió.
La inmigración, punto sensible de la campaña
Hillary Clinton, favorita de cara a las primarias demócratas, prometió defender las acciones ejecutivas en materia migratoria promovidas por el actual presidente, Barack Obama, y dijo que si el Congreso no actúa, hará todo lo posible "para ir más allá" y evitar las separación de miles de familias. Mencionó que lograr una reforma migratoria no es solo un "imperativo económico", sino también un "imperativo moral, familiar, y estadounidense". Los tres aspirantes dedicaron palabras a sus rivales republicanos en general, pero en concreto mencionaron al precandidato Donald Trump, quien en la presentación de su campaña electoral calificó recientemente a los mexicanos como "violadores y criminales".
"Sé que todos los que estamos aquí hoy comparten mi disgusto con los comentarios que Donald Trump hizo recientemente. Pero el verdadero problema no es que los republicanos tengan a alguien que se presente para presidente con tal odio, el problema es que es muy difícil diferenciarlo de los otros candidatos que tienen en su campo", dijo O'Malley, cuyas palabras fueron saludadas por aplausos. Asimismo, Sanders defendió que los inmigrantes "son parte de la estructura de Estados Unidos" y dijo que el país está "haciendo progresos y no hay vuelta atrás", al abordar los asuntos raciales y tras criticar las palabras del magnate.
Clinton criticó al resto de los conservadores que se han presentado a la carrera presidencial por no haber salido a condenar las palabras de su compañero de partido con prontitud y recurrió a una palabra en español para responder a los continuados ataques de Donald Trump a los inmigrantes: "Basta".
MS (efe/Reuters)