Los enemigos de Israel
15 de abril de 2003
"El país tiene armamento químico, esconde a terroristas y provee de armas y explosivos a atacantes suicidas y otros extremistas." Estas acusaciones ya no se refieren a Irak sino a Siria. La administración Bush no ha hecho ningún secreto de su deseo de reordenar por completo la región del Medio Oriente.
El presidente George W. Bush reiteró su advertencia contra Siria para que no acoja a líderes del derrocado régimen de Sadam Husein y coopere con Washington. "Siria tiene que cooperar con nosotros, lo dije claramente el viernes y lo reitero hoy", dijo Bush a su regreso de su residencia de Camp David, en las montañas de Maryland. "Creemos que hay armas químicas en Siria, pero cada situación requerirá una respuesta diferente", señaló Bush, sin dar detalles.
Irak sólo el principio
El gobierno Sirio negó categóricamente las acusaciones de Estados Unidos y denunció que Washington intenta desviar la atención sobre las tragedias, saqueos y robos que ocurren en Irak. El presidente sirio, Bachar al Asad se encuentra en la mira de Washington y mantiene intensas consultas diplomáticas con países vecinos.
Según los planes de los halcones de Washington, Irak es tan sólo el principio. El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld volvió a repetir el domingo que "absolutamente y sin lugar a dudas, varios mandos iraquíes se han refugiado en Siria y añadió que Damasco está cometiendo muchos errores asociándose con la gente equivocada al dar ayuda militar a dirigentes iraquíes".
Siria ha estado en la lista de terroristas del Departamento de Estado por años. El Pentágono cree que el gobierno Sirio ha trabajado con Irán y ha servido de ruta de tránsito para el Hizbulá. También el secretario de Estado, Colin Powell, expresó sospechas de que Siria otorgue refugio a líderes del régimen iraquí.
Europeos se distancian
El ministro del Exterior británico, Jack Straw, aseguró que tras la guerra contra Irak los aliados no tienen planeado atacar al país mesopotámico. "Siria no está en la lista, pero hay cuestiones a las que Damasco debe responder", haciendo alusión a las acusaciones sobre posesión de armas de exterminio masivo y el dar acogida a líderes iraquíes.
El gobierno británico enviará al viceministro del Exterior, Mike O’Brien, a Damasco y Teherán, lo que demuestra que el Reino Unido mantendrá abierto el canal diplomático con estos países y que no comparte el juicio de Washington de que son estados ‘criminales’.
Acusaciones de Israel
En entrevista con la emisora árabe Al Jazeera, la portavoz del ministerio del Exterior siria, Buthayna Shaaban, dijo que las acusaciones vienen de Israel, "que es el principal instigador para minar las relaciones entre Siria y Estados Unidos".
Siria e Irán, tras la caída del régimen de Sadam Husein, son vistos en Israel como sus principales enemigos potenciales en el Medio Oriente. Los guerrilleros de Hizbulá, Partido de Dios, que operan desde la zona de seguridad que Israel ocupó hasta el año 2000, cuando sus tropas fueron replegadas después de una ocupación de 22 años en el sur del Líbano, han desarrollado una intensa actividad en las últimas 48 horas, según agencias de noticias.
La emisora de las Fuerzas Armadas israelíes dijo que los combatientes islámicos del Líbano, instalados a lo largo de la línea fronteriza con Israel, han emplazado nuevas piezas de artillería junto a la frontera y desde ahí disparan fuego antiaéreo contra poblados israelínes de Galilea.
Enemigos de Israel
La reclamación a Siria por las actividades militares de Hizbulá, se debe a que Damasco controla, con unos 30.000 soldados, vastas zonas del territorio libanés, incluso los campos de entrenamiento utilizados por los guerrilleros.
Desde la primera guerra árabe-israelí de 1948, Siria mantiene un estado de beligerancia con Israel, mientras que Irán rompió sus relaciones diplomáticas tras la revolución islámica de 1979. Ambos países cuentan con misiles balísticos que pueden alcanzar Israel. Según fuentes militares israelíes, Irán también está desarrollando un programa nuclear que puede culminar con la fabricación de la bomba atómica. Israel, aunque no lo reconoce oficialmente, es la única potencia atómica en el Medio Oriente, según medios especializados.