"Los guardianes de la conciencia"
15 de febrero de 2003"No conocemos cada cueva ni cada rincón", dijo Hans Blix, "no hemos encontrado armas químicas ni biológicas". Y añadió: "aunque Irak no respondió a ciertas dudas sobre la existencia de armas de destrucción masiva, tampoco se hallaron pruebas de que tales armas existan". Blix, presidente de la Comisión de las Naciones Unidas para la Inspección, Vigilancia y Verificación del desarme iraquí (UNMOVIC), aseguró en su segundo informe ante el Consejo de Seguridad de la ONU que Bagdad colabora, aunque no plenamente.
"No tenemos ningún indicio de que los iraquíes hayan sabido de antemano qué lugares serían inspeccionados" dijo Blix, aludiendo a las afirmaciones del Secretario de Estado de EEUU, Colin Powell, de que Irak evacuó los lugares sospechosos previamente a las inspecciones. En la sesión pública del consejo, en la que tomaron parte diez ministros de Asuntos Exteriores bajo la presidencia del jefe de la diplomacia alemana, Joschka Fischer, se aguardaba con gran espectación el informe del jefe de inspectores.
El director General de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Mohamed El Baradei, co-responsable del informe, dijo que las inspecciones están produciendo resultados y exhortó a fortalecerlas engrosando el número de inspectores y dándoles más tiempo para que continúen su labor. El Baradei elogió el decreto emitido unas horas antes por Bagdad que prohibe las armas de destrucción masiva.
Estados Unidos mantiene mano dura
Colin Powell, exhortó a mantener la presión militar sobre Irak. Dirigiéndose sobre todo a los países que no comparten la posición de línea dura de su país en el conflicto con Bagdad, dijo que la amenaza de uso de fuerza militar debe mantenerse. El estratega de la Guerra del Golfo, acusó a Irak de jugar con la ONU a ganar tiempo: "Hasta hoy no hemos visto el nivel de cooperación que se esperaba y no podemos permitir que este proceso se prolongue indefinidamente". Powell rechazó la propuesta de Francia a favor de duplicar o triplicar el número de inspectores de la ONU. "Lo que se necesita es una cooperación inmediata, activa y total de Bagdad", dijo.
"No se justifica el uso de violencia"
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Dominique de Villepin, dijo que las inspecciones están produciendo resultados e insistió en que éstas deben continuar. Calificando a los miembros del Consejo de Seguridad como "guardianes de la conciencia", de Villepin apeló a dar toda oportunidad de éxito a los inspectores. "No sentimos la menor identificación con Sadam Husein ni con su régimen, pero la guerra siempre es la peor de todas las soluciones" dijo. El ministro declaró que no se tienen pruebas contundentes sobre el vínculo entre Irak y la organización terrorista Al Qaeda y llamó a realizar una nueva reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el desarme de Irak, el 14 de marzo.
Si bien el jefe de inspectores de la ONU acusó a Irak de no presentar pruebas que confirmen el estado de su armamento químico y biológico, ni sobre su programa de misiles de largo alcance, que desmientan o confirmen las advertencias realizadas por los servicios secretos y gobiernos de varios países, su informe fortalece la argumentación de quienes piden dar más tiempo a las inspecciones. Ciertamente no se esperaba nada nuevo en el segundo reporte de Blix, aunque dió argumentos a quienes están a favor de una intervención armada y a quienes están en contra, tampoco dejó a nadie satisfecho.